[Roleo/Cambio de Facción] De Jedi a Mandaloriano

El viejo zabrak se dirigió hacia su planeta natal, a Iridonia. Se fue con la mente turbada y los ojos llenos de melancolía, había llegado la hora de irse, de irse literalmente.
Llegó en su nave pequeña a la ciudad capital del planeta y caminó por las viejas veredas, que ya no eran nada como el las recordaba.

Caminó por horas en el lugar que le vio nacer, aunque no era igual. En realidad, nada era ya igual, esa era la razón por la que se encontraba ahí.

Desde que la orden jedi se vio decayendo y perdiendo terreno a sus enemigos, el viejo se vio afectado severamente en su interior. Trató de restaurar con ayuda de sus compañeros a la Orden pero simplemente ya era imposible. Había llegado la recta final.


Se dirigió al monte y caminó montaña arriba, hacia la aldea donde habia nacido, al haber llegado, observo las mismas ruinas de hace años, años incontables para el jedi, años que ya no recordaba, que le nublaban la vista, y años que para el, ya no tenian sentido vivir mas.

Se paro en medio de la aldea, se giro a su alrededor y tras haber meditado un poco, tomó de golpe la insignia de la orden jedi que tenía desde chico colgando en su cuello y con la fuerza la levanto unos 20 centímetros arriba de su cabeza, levantó la visión y tomando con la mano derecha su sable, lo encendió y atravesó la insignia por el medio.

Esto significaba lo que el zabrak sentía por la orden jedi en esos momentos, su corazón era de ella pero ya no la veía igual, por que ya no era igual en realidad, se habian olvidado los valores principales del Jedi. El mismo código se torció y se volvió la antítesis de lo que representaba. Eso era lo que pensaba el viejo.

Tras haber destruido su insignia, se puso de rodillas en el suelo y con su mano izquierda tomo otro sable de su cinturón, lo encendió y con un sable en cada mano, se colocó los dos de forma cruzada en su cuello y tras dar un fuerte grito que resonó en el valle de Iridonia, prosiguió a cortarse la cabeza.

Todo había terminado para el Jedi. En realidad sentía lo mismo desde muchos años atrás pero prefería esconderlo y seguir luchando. Pero ya no podía mas. Era el fin de su travesía.

En otro lado del universo, un nuevo ser nacía. Era un humano. Nació en un lugar de influencia mandaloriana, así que su futuro estaba decidido desde el inicio.

(El personaje de Kawomin Linsteck muere, y nace un nuevo personaje mandaloriano)

Buen roleo amigo, muy realista