[Roleo Yavin IV] El tiro por la culata.
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[Roleo Yavin IV] El tiro por la culata.
Panzer, un simple esclavo massassi de la base situada en Yavin IV, había sido abandonado en un misterioso planeta del borde exterior con la finalidad de cumplir su castigo debido a la falta de lealtad hacia sus cargos altos. Te preguntarás ''¿cuál es la razón?''. Posiblemente no sea algo del otro mundo, pero Yavin IV se caracteriza por su estricto sistema y sus reglas, y, aunque escupir en la bebida de un simple guerrero de esta base no sea algo grave en otro lugar, en Yavin IV supone una falta grave que supone un castigo equivalente.
El planeta no era algo del otro mundo, o al menos eso parecía. El castigo se basaba en sobrevivir durante una semana a la variedad de bestias y la extraña vegetación que predominaba en aquel planeta, y, aunque parecía algo fácil, para un simple esclavo poco formado era un trabajo muy duro.
Ya casi sin poder mantenerse en pie, con sus vestimentas ensangrentadas y un poco descoloridas, caminaba Panzer en busca de agua, algo que escaseaba en dicho planeta. El agua, como todos sabéis, es unos de los principales recursos necesarios para la vida. No solo de los seres vivos, sino también de los ecosistemas. Cuanto más andaba, más sequedad veía y por tanto menos autoestima le quedaba.
Pero siempre perduraba la ira, la ansiedad por vengarse de aquel guerrero cuando finalizara su castigo, hacía que nunca tirara la toalla. Cuanta más ira sentía, más fuerza tenía, mejor se sentía.
Apenas había esperanza de encontrar un lugar con agua, y bueno, la suerte del principiante, el destino, llamadlo como queráis, pero al final acabó encontrando una charca algo peculiar. No había ni un solo animal. Al principio, evidentemente rebosaba de felicidad al encontrar dicha charca, pero que no hubiera ningún tipo de animal acuático hacía que su cabeza se llenara de preguntas y sospechas. Ese agua no era un agua normal. ¿Estaría envenenado?, ¿qué podría ser aquello?
El cielo tronaba. Las nubes se ennegrecían cargadas de agua. El esclavo se cubrió bajo un árbol, procurando no mojarse. El agua comenzó a caer con una gran fuerza. Entonces, se fijó en la charca. Los pocos peces que quedaban en ésta, subían a la superficie del agua tiesos como palos. Estaban muertos.
Entonces si dio cuenta. El agua de la lluvia estaba contaminada, y posiblemente podía ser lluvia ácida con una gran cantidad de gases superior a la de cualquier otro planeta, por lo que ésta, al caer sobre la charca, aniquilaba todo ser vivo que se encontrara en ella.
Panzer no pudo evitar pensar si ese agua podría también asesinar a individuo de mayor tamaño ... como el guerrero que le había jugado aquella mala pasada.
Súbitamente, el esclavo descolgó su lanvarok, y cortó el árbol por la mitad. Mientras se cubría con una de estas mitades de la lluvia, fabricaba una especie de cuenco con un pedazo de tronco. Acto seguido, se dirigió a la charca, rellenando el cuenco con agua de la charca.
Entonces se dirigió hacia Yavin IV.
Al llegar, el primero en recibirle fue el mismísimo guerrero, que cada mañana se sentaba frente a la plataforma de aterrizaje esperando que no aterrizara ni una sola nave, es decir, esperando que el esclavo estuviese muerto.
- Guerrero, -le dije- siento mi falta de lealtad. Le traigo un obsequio mostrándole la gran vergüenza que siento.
Entonces le mostré mi mano. Contuve el cuenco de agua en mi mano, esperando a que el guerrero lo tomara. Me miraba de forma extrañada. Al final accedió.
- Entiendo ...
Cogió el cuenco con el agua, y tras observarlo durante unos segundos, accedió a beberlo. No parecía afectarle, pero pasados unos segundos se veía como empezaba a pestañear de una forma increíble. El guerrero cayó al suelo creando un pequeño temblor a su alrededor. Agarré el cuenco con agua y los aplasté con mis manos. Luego lo tiré lejos del lugar .Súbitamente, corrí a avisar al resto de los miembros massassis.
- ¡Eh, eh, el guerrero Maleval ha caído!
- ¿Qué estás diciendo, como puede haber pasado? —Contestaron a coro.
- Que ... lamentable e inexplicablemente ha caído .. —Les contesté con cierta tensión, tratando de fingir pena.
Andamos tranquilos hacia el cadáver. Tras observarlo durante unos segundos en silencio, alguien lo rompió.
- Era un guerrero débil —Comentó el Pupilo Vaqrad.
- Estoy de acuerdo —Afirmé firmemente.
A Panzer le había salido bien todo aquello, pues ademas de haber sido ascendido, había destruido a su mayor enemigo, Maleval. Había matado dos pájaros de un tiro.
Pero como dice el dicho, se pilla antes a un mentiroso que a un cojo, y no duró mucho aquella trama. Pasaron los meses, y todos notaban a Panzer bastante tenso. No soportaba el peso de cargar con una mentira durante toda su vida, y menos a ese nivel. El esclavo, aunque ascendido a Pupilo Panzer, fue asesinado durante un entrenamiento especial con el Pupilo Musnus. Así acaba su historia.
El planeta no era algo del otro mundo, o al menos eso parecía. El castigo se basaba en sobrevivir durante una semana a la variedad de bestias y la extraña vegetación que predominaba en aquel planeta, y, aunque parecía algo fácil, para un simple esclavo poco formado era un trabajo muy duro.
Ya casi sin poder mantenerse en pie, con sus vestimentas ensangrentadas y un poco descoloridas, caminaba Panzer en busca de agua, algo que escaseaba en dicho planeta. El agua, como todos sabéis, es unos de los principales recursos necesarios para la vida. No solo de los seres vivos, sino también de los ecosistemas. Cuanto más andaba, más sequedad veía y por tanto menos autoestima le quedaba.
Pero siempre perduraba la ira, la ansiedad por vengarse de aquel guerrero cuando finalizara su castigo, hacía que nunca tirara la toalla. Cuanta más ira sentía, más fuerza tenía, mejor se sentía.
Apenas había esperanza de encontrar un lugar con agua, y bueno, la suerte del principiante, el destino, llamadlo como queráis, pero al final acabó encontrando una charca algo peculiar. No había ni un solo animal. Al principio, evidentemente rebosaba de felicidad al encontrar dicha charca, pero que no hubiera ningún tipo de animal acuático hacía que su cabeza se llenara de preguntas y sospechas. Ese agua no era un agua normal. ¿Estaría envenenado?, ¿qué podría ser aquello?
El cielo tronaba. Las nubes se ennegrecían cargadas de agua. El esclavo se cubrió bajo un árbol, procurando no mojarse. El agua comenzó a caer con una gran fuerza. Entonces, se fijó en la charca. Los pocos peces que quedaban en ésta, subían a la superficie del agua tiesos como palos. Estaban muertos.
Entonces si dio cuenta. El agua de la lluvia estaba contaminada, y posiblemente podía ser lluvia ácida con una gran cantidad de gases superior a la de cualquier otro planeta, por lo que ésta, al caer sobre la charca, aniquilaba todo ser vivo que se encontrara en ella.
Panzer no pudo evitar pensar si ese agua podría también asesinar a individuo de mayor tamaño ... como el guerrero que le había jugado aquella mala pasada.
Súbitamente, el esclavo descolgó su lanvarok, y cortó el árbol por la mitad. Mientras se cubría con una de estas mitades de la lluvia, fabricaba una especie de cuenco con un pedazo de tronco. Acto seguido, se dirigió a la charca, rellenando el cuenco con agua de la charca.
- Spoiler:
Entonces se dirigió hacia Yavin IV.
- Spoiler:
Al llegar, el primero en recibirle fue el mismísimo guerrero, que cada mañana se sentaba frente a la plataforma de aterrizaje esperando que no aterrizara ni una sola nave, es decir, esperando que el esclavo estuviese muerto.
- Guerrero, -le dije- siento mi falta de lealtad. Le traigo un obsequio mostrándole la gran vergüenza que siento.
Entonces le mostré mi mano. Contuve el cuenco de agua en mi mano, esperando a que el guerrero lo tomara. Me miraba de forma extrañada. Al final accedió.
- Entiendo ...
Cogió el cuenco con el agua, y tras observarlo durante unos segundos, accedió a beberlo. No parecía afectarle, pero pasados unos segundos se veía como empezaba a pestañear de una forma increíble. El guerrero cayó al suelo creando un pequeño temblor a su alrededor. Agarré el cuenco con agua y los aplasté con mis manos. Luego lo tiré lejos del lugar .Súbitamente, corrí a avisar al resto de los miembros massassis.
- ¡Eh, eh, el guerrero Maleval ha caído!
- ¿Qué estás diciendo, como puede haber pasado? —Contestaron a coro.
- Que ... lamentable e inexplicablemente ha caído .. —Les contesté con cierta tensión, tratando de fingir pena.
Andamos tranquilos hacia el cadáver. Tras observarlo durante unos segundos en silencio, alguien lo rompió.
- Era un guerrero débil —Comentó el Pupilo Vaqrad.
- Estoy de acuerdo —Afirmé firmemente.
A Panzer le había salido bien todo aquello, pues ademas de haber sido ascendido, había destruido a su mayor enemigo, Maleval. Había matado dos pájaros de un tiro.
Pero como dice el dicho, se pilla antes a un mentiroso que a un cojo, y no duró mucho aquella trama. Pasaron los meses, y todos notaban a Panzer bastante tenso. No soportaba el peso de cargar con una mentira durante toda su vida, y menos a ese nivel. El esclavo, aunque ascendido a Pupilo Panzer, fue asesinado durante un entrenamiento especial con el Pupilo Musnus. Así acaba su historia.
Invitado- Invitado
Re: [Roleo Yavin IV] El tiro por la culata.
Buen roleo ^^
Kalgrath- Mensajes : 26
Fecha de inscripción : 06/02/2012
Re: [Roleo Yavin IV] El tiro por la culata.
Lo unico malo del roleo. Es el nombre xD, jajajajaja. No mentiras muy bueno.
Sathiel Tainted.- Mensajes : 280
Fecha de inscripción : 18/08/2011
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