[Roleo de Achillea/Escrito] Pesadilla. [Relan]

por Djinn Dom Mar 31, 2013 12:40 am

Spoiler:

" Capítulo II; Pesadilla ".

[center]''Entre las sombras fui cegado... me había criado en un lugar el cual creía no corresponder y al parecer era cierto.''
''En mi mente vive una bestia que perturba mis sueños''.

Apenas pude cerrar mis ojos luego de un arduo día de entrenamiento, la luz se apagaba y era todo de color negro. Las horas pasaban y mi mente comenzó a quebrar mi corazón frágil, pesadillas se apoderaban de mi cuerpo que se movía sin sentido alguno por fuera del sueño.
''¿Qué es esto?''. Me pregunte a mi mismo, lo único que podía ver era un pasillo largo, un suelo gris y las paredes negras con grandes retratos, me acerque a ver uno de ellos y lo único que pude ver es como estaba mi cuerpo adulto, tirado en las frías nieves de aquel lugar sombrío, atravesado por un sale de color rojo como la sangre y un hombre que sostenía ese sable, una bestia entre los hombres pero lamentablemente desconocía quien era. Continué caminando entre el pasillo alargado hasta que llego un momento, me detuve en frente de un fin de los cuadros grises del suelo, baje mi mirada y no pude notar nada. Apenas pude parpadear para poder notar una figura delante de mi, una figura tenebrosa que tapaba su rostro con su capucha negra con decoraciones rojas... ''¿Quien eres?''. Me pregunte yo, sin saber lo que ocurría. Reaccione ante su sable de luz rojo al prenderse y luego otro. Tome uno de ellos al ver su mano estirada hacia mi y lo sostuve con fuerza aún sin saber lo que estaba ocurriendo.. No pude aguantar aquella sed de descubrir lo que pasaba por lo que actué a atacar sobre su estomago, intentando cortar su pecho de forma horizontal, luego vertical pero nada ocurría, cada corte se difuminaba en una humo negro que lo rodeaba cada vez mas. Alce mi mirada para poder verlo, una sonrisa destruida por los Dioses, un corte y nada mas. El sable había atravesado mi cuello de forma veloz en el que no podía reaccionar de forma alguna. Tendido en el suelo tuve que caer, arrodillándome de el miedo, las lagrimas caían sobre mi rostro hasta tocar el suelo gris. Baje mi mirada para poder notar las lagrimas, el suelo comenzó a desarmarse, reaccionando tuve que levantarme y comenzar a correr hacia donde venia, choque contra una pared que jamás pude haber notado desde un principio y el suelo se termino, cayendo al vació y extendiendo mi palma izquierda hacia arriba, intentando tocar algo, como si algo o alguien me pudiese salvar en este mundo que yo desconocía. Tendido en el suelo volví a abrir mis ojos, con un dolor horrible contra mi espalda, un suelo blanco, mas blanco que mi piel pálida de naturaleza. Era nieve al parecer, la pude sentir apoyando mis palmas sobre el suelo, apenas pude sonreír intentando creer que aquello había terminado, tocándome el cuello y al ver que no lo había perdido, no había perdido mi cabeza. Mire hacia el cielo y veía como los copos de nieve caían sobre mi rostro y se disolvían apenas tocarse pero esto me perturbo, un ruido podía sentir desde el lado norte de donde me encontraba, gire mi cuerpo para poder ver que era lo que ocurría y nada mas note una bestia gigante de color blanco quien asechaba con todas sus furias el lugar, los arboles, aplastando todo. ''Un monstruo..'' Apenas pude murmurar luego de recibir un grandioso golpe entre sus garras que me azotaba con fuerza contra una de las montañas de el nevado lugar. Caí al suelo tendido, recuperando fuerzas y comencé a correr como un niño, asustado de lo que estaba sucediendo mientras que el ojo rojo de la grandiosa bestia me seguía en sus pasos de araña atrás de mi. Mirando hacia los lados pude encontrar una caverna dentro de las montañas, no tuve opción de ocultarme ahí, a pasos rápidos mientras que la bestia entraba rompiendo pedazos de la entrada de la cueva sin importar nada.

Bichos pequeños con alas descendían desde el techo de la caverna hacia la bestia, chocando y muriendo por el golpe al avanzar. No dude en correr para esconderme en la oscuridad de las rocas gigantes antes de que la bestia se diese vuelta y me buscara por doquier. Cerré mis ojos y aproveche para tomar un poco de aire hasta que por fin se dio vuelta, desde su ojo luminoso soltó una luz brillante de color rojo que rodeaba toda la cueva, mostrando las sombras en todos los lados, hasta la mía. Golpeando fuertemente la roca, rompiéndola y yo por detrás, chocando contra las grandes paredes de la cueva. ''Estoy completamente muerto...''. Pronuncie al sentir las afiladas manos sostenerme y cortando mi cuerpo al tomarme, me acerco hacia su ojo y no dude en golpearlo con mi puño, pero lo único que pude obtener es dolor hacia mi mismo al sentir lo duro que era su grandiosa armadura de metal. Lanzado otra vez fui yo, sintiendo la espesura de la gran pared que se encontraba al fondo de la gran cueva, iluminada por el farol de su ojo rojo, mas no podía ver, estaba cegado. Caí al suelo para retomar el impulso de mis manos y comenzar a correr, de una mirada a otra pude notar una pequeña grieta para el grandioso monstruo pero por fortuna entraba justo para mi, entre a ella de un momento a otro, dejando atrás a la grandiosa bestia quien gritaba con furias y me deseaba la muerte misma. Apenas gire mi cabeza para poder dar un paso hacia adelante y caer sobre lo que quedaba afuera de la cueva, un túnel de caída y ahí estaba yo, cayendo otra vez por aquel lugar negro pero no sentí mas nada que una mano fría y grande sobre mis muslos al caer. Ya estaba harto de todo lo que estaba ocurriendo, ya quería despertar de este sueño sin final, agarrándome la cabeza y con fuerzas comencé a gritar, con desesperación al cual mano gigante golpeo mi rostro, dejándome caer contra el suelo. Mi espalda se rompía por completo al sentir el gran manotazo que destruía el suelo junto a mi, el dolor caía con una lagrima desde mi rostro y con esfuerzo y por razones que yo no podía entender me volvía a levantar, alce mi mirada y pude ver el rostro de aquella persona con manos grandes que sostenía en una de sus manos un látigo de color rojo también. Mis lagrimas caían sin parar sin saber que era lo que estaba ocurriendo, estaba desesperado, sin razonamiento. ''¡Deja de lloriquear!''. Al escuchar su voz tenebrosa volví a soltar otra lagrima mas. ''¡ Maldición! eres una nena, levántate y toma tu sable''. Mire hacia un costado el sable que estaba suelto en el suelo, lo tome y lo encendí, me puse de pie con las pocas energías que me quedaban, tambaleándome intente cortar la mano de aquella persona gigante pero no lograba nada, un latigazo recibí con gran odio que cortaba mis ropajes por completo y se desprendía cuando el látigo aún no terminaba de dar su castigo, cortándome la espalda por completo, sangre se podía ver chorrear por mi espalda. ''!AAAAAAAAAAAAAH¡''. Caí al suelo tendido, soltando mi sable mientras que se apagaba por completo, dejando el humo de el cristal surgir hacia el aire por completo. Levante la mirada con las lagrimas cayendo entre mis ojos y mi piel pálida para poder notar el rostro de aquella persona, un monstruo mas delgado que el anterior, con formación de un humano, pero un humano hijo del demonio mismo, sosteniendo su látigo lleno de sangre que se desvanecía en cada momento. ''Déjame en paz...''. Apoyando ambas manos en el suelo destruido volví a levantarme, sufriendo por el dolor de mi espalda mientras que volví a mirar aquel rostro que penetraba mi mente, sofocándome con el odio hacia mi. ''¡ Aléjate de mi!''. Grite, comenzando a correr hacia en dirección contraria por donde se encontraba el domador. Pero no pude aguantar aquel golpe otra vez recibido, pero esta vez en mi pierna, dejándome sin movilidad alguna. Cayendo nuevamente al suelo, golpeando mi rostro contra el suelo y siendo recogido por aquellas manos frías y grandes por la bestia. ''Lucha y no me desilusiones''. Mirándolo con odio decidí soltarme de aquellas manos, dejándome en el suelo fue como tome con decisión el sable sin decir una sola palabra, era lo mejor que podía hacer para poder terminar con esta pesadilla que estaba acabando con mi mente. Tomando el sable de luz con ambas manos comencé a correr hacia aquel cuerpo blanco sin vida, intente cortarlo por el cuello al acercarme hacia el, pero el lo evito bloqueando con su látigo, sosteniendo con ambas manos en cada punta, al parecer era algo de no romperse. Amarrándome con lo que sobraba me lanzo hacia el aire y luego volvió a cortarme el brazo derecho, cayendo en el suelo, volví a respirar y comencé otra carrera mas hacia el enemigo, me tendió contra el suelo, luego de tomarme con su látigo mi pie izquierdo, lastimándome aún mas. Volví a levantarme otra vez mas, con las fuerzas suficientes para poder saltar y colgarme sobre su cuello, tendiéndome de lado a lado para intentar que yo me suelte pero no lo logro, corte su hombro derecho pero no le causo demasiado daño, me tomo con ambas manos y me volvió a lanzar contra el suelo. Comenzó a reírse en frente de mi cara, un millón de cosas se vinieron a mi mente, creí que este iba a ser el fin, mi mente nublada de color negro sin poder pensar en algo, solo en instinto humano me podría ayudar. Tome el sable de luz desde el suelo mientras que giraba con mi espalda en el suelo para luego levantarme de forma veloz, colocando mi rodilla derecha y mi pie sobre el suelo corte su estomago, realizando una bella y honorable estocada que lo dejaría sin vida. Solté el sable que se apagaría luego, para caer en el suelo, mis intensiones no eran matar pero lo tuve que hacer. Creí que todo ya había acabado, me tendí sobre el suelo y mis ojos se volvieron a cerrar.
''Pobre joven, todo lastimado y sin cuidado''. Abrí mis ojos de golpe, un sendero me esperaba en frente de mi, comencé a caminar para poder seguir camino pero no sabia a donde me dirigía, mientras que aquella voz volvía a perturbarme la mente una y otra vez. A las lejanías logre ver una casa destruida por completo, camine hacia ella pero me detuve en frente mientras que mis rodillas caían por si solas en el suelo y mi cuerpo se tendía contra el mismo, cerrando mis ojos. Apenas pude notar a 3 mujeres luego de fregarme bien los ojos. Intente levantarme apoyando ambas manos en donde me encontraba, algo suave sentía en mis manos, era una cama, que estaba haciendo yo aquí me pude preguntar apenas al intentar moverme, pero no tenia movilidad, las heridas causadas eran muy grandes. Una de las mujeres se acerco hacia mi, apenas tocando su nariz con la mía, estaba sorprendido, solo era un joven que para el era un pecado este tipo de acciones. Intento alejarse rápidamente de ella pero su hermosura era demasiada para poder contemplarla, tocándome el cuerpo intente apartarla pero mis manos estaban atadas contra la pared que apoyaba la cama. Comencé a moverme de la desesperación al poder notar la desfiguración que comenzaban a tomar estas personas, unos rostros deformes y maléficos comenzaron a mirarme y se acercaban cada vez mas sedientos de sangre y muerte. '' Morirás, hoy morirás..''. Una chica me decía luego de lamer mi mejilla izquierda. Intente apartarme pero tomo de mi cuello y comenzó a apretarlo con fuerza, para luego soltarme. ''No volverás a ver nunca jamas a nadie''. Me decía la otra mientras que comenzaba a morderme mi hombro derecho, soltando sangre y masticando un pedazo de mi carne. ''Suéltenme bestias''. Apenas pude decir pero el dolor me consumía cada vez mas y el movimiento brusco de mis manos lastimaba mas mis heridas el cual comenzaron a abrirse y soltaron sangre por doquiera. Las mujeres se alegraron al ver la sangre y comenzaron a lamer mi cuerpo repleto de ella, asustado estaba yo aún soltando las lagrimas que me quedaban, sin poder hacer nada volví a levantar mi mirada. Una mujer pálida, se podían notar las venas rojas por su cuerpo y sus ojos amarillos que penetraban, se acercaba hacia mi sin saber quien era ella y me decía a cada tanto. ''Es hora de que dejes tu pasado''. Al oír aquellas palabras todo se desplomo en cenizas, aquellas mujeres, todo lo que había soñado, por completo se volvía cenizas en frente de mi y se dispersaban en el aire, en un fondo blanco. La voz seguía perturbando mi mente en el cual volvía a repetir ''Es hora de que dejes tu pasado''. Una y otra vez, las pequeñas palabras golpeaban mi mente.

''¿Te encuentras bien?''. Escuche aquella voz ya conocida alguna vez. Abrí mis ojos para poder ver quien era, Adellie otra vez, sonreí al verla pero sin poder contestar a su pregunta... Mire hacia abajo para poder parpadear mientras que las gotas de sudor caían sobre mi cabeza y una pequeña gota de lagrima desde mi ojo al suelo.
''Solo una pesadilla...''.

por Darth Plagueis Dom Mar 31, 2013 1:41 am

Narras bien, muy buena estética y geniales las imágenes... Aunque, como veo, este es el segundo capítulo de un roleo, y para que sepas, todas las partes de un roleo, se publican en el mismo post... solo eso

por Satella Dom Mar 31, 2013 1:44 am

Quiere llamar la atención publicando más (?)

Buen roleo.

salu2

por Djinn Dom Mar 31, 2013 1:48 am

Gracias por aclararme, no lo sabia así que colocare los capítulos aquí mismo.

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