[Roleo/cambio de faccion] La vida de un Gungan [Seltar]

·La vida de un GunGan


Había pasado mucho tiempo desde que escapó de Naboo, dirigiendose a cualquier lugar en el que combatir y sentirse pleno, ya que era lo que le gustaba. En los últimos días había sentido algo muy extraño, echaba de menos sus tiempos en su planeta natal, Naboo. Jahai Tarpals Nass era heredero al trono de Otoh Gunga, aunque llevase un largo tiempo siendo uno más, sabía que allí le necesitaban ya que tenía grandes dotes de liderazgo. La armadura de soldado que portaba Jahai cayó al suelo dando un gran golpe, justo después de que este se la quitase. Abrió uno de sus armarios, donde llevaba sus antiguos ropajes de guerrero y se los colocó, dispuesto a volver al lugar donde siempre quiso estar, su hogar. Cuando ya había llegado a su nave para partir al planeta Naboo se quedó pensativo, miraba hacia arriba sin saber que era lo que le esperaba tras tanto tiempo fuera del lugar...¿Sería bien recibido tras exiliarse y abandonar a los ciudadanos?...era la pregunta que se hacía constantemente Jahai. La nave empezó a ascender con gran velocidad, tras marcar los coordenadas ya no había vuelta atrás, sabía que hacía lo correcto y que algún día se lo recompensarían. La nave del Gun Gan avanzaba en dirección a su destino, una sonrisa apareció en la cara de "pato" que tenía el gungan. A lo lejos ya podía ver la superficie verde y azul de su planeta natal. Estaba impaciente por llegar y sumergirse en las aguas de Naboo para llegar a la ciudad, donde esperaría una respuesta de los ciudadanos y su padre, que aun gobernaba en la ciudada. La nave descendía rápdamente hasta tocar la superficie del planeta, punto en el que se detuvo. La nave se abrió emitiendo un sonido extraño, lo que no procupó al Gungan. Este dio un torpe salto estando a punto de caer al suelo, aunque lo impidió justo antes de hacerlo dando un enorme paso hacia alante y equilibrando su cuerpo. Los pasos de Jahai le conducían hacia el agua. Esta zona del planeta era igual a lo que recordaba, por lo que sabía por donde debía ir.




Minutos después, tras haberse sumergido en uno de los vehículos que había fuera y completar la travesía hasta la entrada de la ciudad salió del objeto quedandose depie. Estaba justo en la entrada de Otoh Gunga, dispuesto a empezar a caminar. Cuando empezó a hacerlo dos guardias le detuvieron por ser un "intruso desconocido". Jahai se quedó desconcertado, no sabía que era lo que estaba pasando exactamente...

-Yo soy Jahai Tarpals Nass, ¡no soy ningún desconocido!-Decía el gungan.
-Eso es imposible, Jahai desapareció hace años y no se ha sabido nada de él desde entonces, eres un simple impostor.-Responde uno de los guardias.
-¿Cómo? Pero yo realmente soy él, puedo demostrarlo...-Dice algo irritado Jahai.
-No me hagas reir, si fueses él nos habríamos dado cuenta de inmediato-Gritaba uno de los guardias mientras me esposaba el otro.

Jahai había sido arrestado por adentrarse en un lugar que no le correspondía y sería enviado a algun tipo de celda, ya que conocía el sistema que tenían los gungan para este tipo de casos. Necesitaba una forma de demostrar que era él pero los guardias se negaban a hacer caso a cualquier cosa de las que este decía. No había modo de escapar pero Jahai estaba seguro de que si había vuelto no era para estar encerrado en una sucia celda. Justo antes de que lo lanzasen a la jaula de metal donde sería encerrado tuvo una idea que a lo mejor podía ayudarle, intentaría que lo llevasen a las propiedades del Jefe Tarpals, donde este posiblemente lo reconocería y le mandaría liberar.


-¡Un momento!...Me he dado cuenta de que no creen que sea el hijo del jefe pero...-Decía Jahai mientras miraba a los guardias.
-Deja de intentar jugar con nosotros, me estoy empezando a cansar de ti-Interrumpió uno de los guardias.
-Si padre se entera de que me habeis encerrado sereis castigados, supongo...¿no sería mejor llevarme ante él y que diga si soy quien digo?-Pregunto sonriendo.

Los dos guardias se alejaron un poco de mi y empezaron a hablar en voz baja, como si estuviesen tomando una decisión. Momentos después se acercaron a mi, moviendome en otra dirección.

-Entonces, ¿me llevaran ante el Jefe?-Pregunto extrañado.
-Sí, y verás como nosotros tenemos razón, serás duramente castigado-Dice con un tono despreciable el guardia que me empuja.
-Eso es lo que crees.-Murmura Jahai.

El grupo de tres gungan caminaba hacia la propiedad del Jefe, donde el extraño que habían encontrado en la entrada de la ciudad sería juzgado y, según esperaba Jahai también sería liberado y se le concederían los títulos que anteriormente tenía. Tenía pensado disculparse ante su padre y darle explicaciones aunque sabiendo que este era comprensivo esperaba hacerlo de forma breve. Pasada una media hora llegaron a la entrada del palacio. Hicieron una señal y las puertas se abrieron con gran velocidad. Estabamos caminando por un suelo de piedra reluciente, había grandes columnas blancas que sostenían la estructura y al fondo, otra puerta, la cual estaba cerrada. Cuando acabamos frente a ella uno de los guardias se adelantó y abrió esta con cuidado. Con un empujón metieron a Jahai dentro de la habitación, estando a punto de caerse, aunque uno de los guardias lo evitó cogiendole de la ropa y tirando hacia atrás. En un gran trono que se podía ver al fondo de la sala había un gungan de mayor edad, aunque tampoco era un anciano. La cara del gungan que estaba sentado era seria, como si le estuviesen molestando por una tontería. Jahai le miró fijamente a los ojos, esperando que este hiciese lo mismo y se diese cuenta de quién era. El momento de tensión se rompió con unas palabras del preso:

-Saludos mi padre, siendo mucho aparecer así-Digo algo nervioso

El jefe se quedó quieto, mirandolo fijamente sin decir nada. Segundos después se levantó de la silla y empezó a hablar con una grave voz:

-Así que has vuelto Jahai...hemos estado esperandote cada día desde que te fuiste y ahora, has llegado-Dice este de modo emotivo.
-Lo siento mucho por haberme ido, no quería hacerle mal a nadie-Respondio el preso.
-Tengo una duda...¿por qué esta él esposado y agarrado por unos guardias?-Preguntó el jefe mirando a los guardias.

Los dos hombres que agarraban a Jahai le quitaron las esposas y se marcharon rápidamente, para no tener que verselas con el padre del preso que habían cogido que resulto ser hijo del jefe gungan. Jahai y su padre empezaron a hablar durante un largo rato. Este se disculpó por marcharse sin decir nada entre otras cosas, dando a entender que quería volver a tomar parte en la sociedad de los gun gan como guerrero, lo que anteriormente había sido y según creía, todavía era.






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Aclaraciones:

Jahai Tarpals Nass vuelve a Naboo donde formara parte del alto consejo gungan y pasa a ser un NPC.
Con la desaparición de mi PJ Gungan paso a usar un sensible a la fuerza.

Cambio válido. Para proximos roleos intenta poner la letra mas pequeña y explicar mejor las cosas, para que los roleos salgan más largos.