[Roleo de Achillea] La rutina.

por Storm Lantish Lun Sep 05, 2011 4:16 pm

Abrir los ojos por la mañana y ver las paredes de Achillea reconforta la vista; saber que estás seguro, que estás rodeado de gente que te aguarda de la galaxia…

Por la mañana, todo es silencio, paseo por los jardines tranquilos y me siento a meditar, viendo criaturas pasar y tocar la brisa con mi propia piel. Cierro los ojos y comienzo a meditar, recordando todos los conceptos que me enseñan día a día en las clases, cuando de pronto:

¡Oh no, se me ha hecho tarde, quedan 5 minutos para mi clase matinal! Salí corriendo hacia la clase teórica con mi maestro; Walsgaf, el cual me esperaba allí con mi compañero Gabaldon.
Walsgaf comenzó a dar la clase y yo, atento, respondo a las preguntas que él me pregunta, al igual que mi compañero. La clase se pasa muy rápida, es hora de ir a entrenar prácticamente, debemos sacar nuestros sables e ir a luchar un poco en la sala de entrenamientos, ya que nuestro maestro es Guardián, y sabe más en el campo de batalla.

Tres, dos, uno… ¡ya! Walsgaf exclamó un grito y empezamos con la batalla y Gabaldon y yo encendimos nuestros sables regulados a modo entrenamiento.
Nada más empezar me tira una esfera con la fuerza que yo desvío hacia un lado, y de pronto, con el sable láser intenta cortarme la cabeza, que yo evado también. Le propino una esfera de la fuerza, y otra, y otra, pensando que alguna no tiene que evadir, y cuando menos se lo espera, salto sobre él, intentándole dar un corte en el cuello para cortarle la cabeza. El combate acabó tras un buen rato luchando, las clases por hoy también.

Ya era media tarde cuando acabamos de entrenar, y el Maestro Krasheer pasó a darnos la noticia que debíamos ayudar al Legado Jedi de Ossus, ya que les había llegado un aviso de que los atacaban. Pues nos dirigimos a las afueras del templo, nos subimos a las naves y pusimos rumbo a Ossus.

Allí todo era caos, refuerzos cloones y los refuerzos del Legado Jedi de Achillea decidimos estar en la superficie y en los caminos a la academia, luchando con pasión y fuerza contra el Imperio Sith, ayudando.

Anunciaron la retirada y tuvimos que irnos hacia Achillea de nuevo, donde estuvimos charlando los que volvimos, que éramos casi todos, ya que no nos queríamos arriesgar a perder gente en el anterior ataque al Legado Jedi de Ossus.
El día fue ajetreado, es hora de dormir, así que puse rumbo a las habitaciones, donde iniciados dormían, y unos padawans les vigilaban. También había unos caballeros charlando de cosas. Me adentré en mi cama y pensé: esperemos a mañana, quizá el Imperio Sith amenace de nuevo; pues debo reponer fuerzas.