[Roleo de Korriban] El Artefacto de Nar Shaddaa [Relan]

Primera Parte

El Lord Lezalit Kan se encontraba junto a su hijo, Altor Kan en los aposentos del Lord. Su padre, tenía que darle una misión y fue breve:
Dirígete a Nar Shaddaa a por este artefacto.. - tras estas palabras le entrega un papel con un dibujo del artefacto.
Padre, ¿qué es este artefacto? ¿De qué se trata? - Decía Altor mientras miraba el esbozo.
Por ahora no es de tu incumbencia, más adelante lo sabrás. Parte ahora mismo hacía Nar Shaddaa, averigua dónde se encuentra y recuperalo. - Protestó el Lord Lezalit Kan.

El Caballero Sith partió de Korriban hacia Nar Shaddaa, una metrópolis sometida al crimen organizado. Tras su llegada se adentró en el Sector Corelliano, en medio de casinos y clubs, del tumulto y desorden, la médula de la urbe.


Tras vagar un rato entre la muchedumbre llegó a un bar de mala muerte en un callejón apartado. El Caballero Sith entró y se encontró un ridículo grupo de personas, varios hutt, algún vippit y varios humanos. Se sentó y pidió algo de beber. Entonces un hutt se acercó a él mirándole con sus enormes ojos, inexpresivos;
¿Qué hace uno de los tuyos aquí? Disfrutando del contagio y la polución que produce este sumidero de mierda, Nar Shaddaa, ¿puede ser..? Hmm.. - Dijo el hutt aún mirándole, mientras llevaba sus esmirriadas manos a su mentón.
Puede ser. - Respondió Altor.
Venga, no seas enigmático. Un Jedi en Nar Shaddaa, no se encuentran tipos como tú por aquí todos los días. Tengo algunos dispositivos que podrían interesarte. - farfulló en su oído.
¿Un Jedi? - Replicó el Caballero.
Claro, oculta mejor tu sable de luz, se puede ver un extremo entre tus túnicas y los que son como tú, aquí no son muy bien vistos.- Explicó muy seguro el hutt.

Entonces Altor y el hutt salieron de ese bar en decadencia para llegar a un callejón solitario. Allí el Sith le mostró el esbozo del artefacto para sonsacarle información y quizá, con suerte el mismo objeto.

¿Tienes idea de qué es esto? - Empezó Altor.
Esto es.. em..- Buscaba la respuesta el contrabandista.
Esto es lo que me interesa. ¿No lo tienes? - Replicó enfurecido el Caballero.
Pues no , no.. - respondía algo acobardado.
Lo quiero, lo más pronto posible y tu vas a ayudarme a encontrarlo. ¿Sabes moverte por aquí no? - Le sujetaba por el cuello mientras se lo decía.
Esto es una piedra del oráculo , o algún amuleto. Son escasos por aquí.. - Le aclaró mientras le devolvía el esbozo lamentándose – Pues si que habéis cambiado los Jedi..- Tras esas ultimas palabras sonrió el Sith, casi riendo, dejando ver su dentadura.-

El contrabandista hutt del Sector Corelliano.

Continuará...

El Caballero Sith y el hutt se adentraron en una posada deteriorada por la polución y el tiempo. Al entrar Altor dejó caer sobre la mesa de recepción una falquitrera con , lo más posible, una cantidad superior de dactarios a lo que valía una habitación de ese lugar casi en ruinas. Apresurado entró en un cuarto cualquiera y obligó a sentarse al hutt. Entonces el Sith sacó un holocomunicador , este se prendio y desplazo una de sus partes, de esta emergio la silueta del Lord Lezalit Kan.


Saludos Padre. - Dijo el Caballero tras que saliera la figura de Lezalit.
Saludos Altor. ¿Tienes algo para decirme? - Exigió en cierto modo su padre.
Sí , un contrabandista me ayudará a encontrar el artilugio. - Añadió Altor pero fue interrumpido por su padre. - Dónde se encuentra el artilugio?
En un complejo de construcción de droides y Caza TIE abandonado, cerca de la órbita de Nar Shaddaa. Allí se encuentra el mayor suburbio de contrabando que.. - Tragó saliba antes de abrir la boca - ¡Cierra la boca, ahora!. - Cortó Altor las habladurías del hutt.
Bien.. Te enviaré unos pocos soldados como reforzamiento.- Añadio Lord Kan.
Pero padre no necesito a nadie para acabar con la misi.. - De nuevo, fue interrumpido. - No lo hago por ti, hijo mio, lo hago para asegurarme que la piedra del oráculo llega aquí. En poco tiempo tendrás tus refuerzos, atento al HoloProyector. Te espero en Korriban. - Finalizó la conversación Lezalit Kan. Entonces la proyección se adentró en el HoloComunicador y durante unos segundos el silencio se adueño de la habitación del motel hasta que.. - Maldita sea.. La piedra del oráculo... - Apretaba los puños el Sith ante el silencio del hutt.


Unos días después el Caballero Sith recibió otra Holo proyección , emergio una figura grande, oscura, con una coraza negra. - Saludos Altor Kan, Hijo del Lord Lezalit Kan. Mi nombre es Lettow Tainted, he venido junto el Gran Moff Dagon Caelum y el Moff Vhand Vermogen cómo apoyo. Cuando estés listo despegaras del planeta y te dirigirás al punto del objetivo, te seguiremos. - De su boca, cubierta por un casco nacieron estas palabras. "Un Sith.. no es un Jedi.. es un Sith.. En que lío me he metido.." - Pasaban una y otra vez por la mente del hutt, ya preocupado y atemorizado por esta situación, que al principio iba a ser un gran negocio.
Bien, estaremos en contacto. - Acabó la breve conversación.

-Deja de comer, hemos de partir. Vas a guiarme hasta el complejo abandonado y entonces encontraremos el artilugio, sin más...- Digo seriamente Altor. -Pe..Pe..Pero.. Si saben que te ayudo me mataran... - Tartamudeaba el hutt mientras engullía el almuerzo. - Deprisa sabandija. - Bramó furioso el Caballero. Tras una hora partieron de Nar Shaddaa con dirección al Suburbio de los traficantes y contrabandistas de cada recóndito lugar de la galaxia dónde trataran de conseguir el artefacto codo con codo con Lettow Tainted, Dagon Lucius Caelum y Vhand Vermogen.


Continuará..