[Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
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[Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
Capítulo I ~ Una fría despedida.
Ha pasado el tiempo, demasiado rápido diría yo, frente a mis ojos, incapaz de darme la posibilidad de decir un último adiós. Será que mi destino no encajaba en el Lado Luminoso, será que no nací para ser de esta misma. Eso se puede comprobar con el paso de los días, y a la larga, me dí cuenta de donde verdaderamente pertenecía..
Recuerdo claramente mis días dentro de la Academia jedi de Endor, mis pasos quedaron grabados en cada sala de entrenamientos, cada respiro o suspiro, peleas o lamentaciones, todo ha quedado ahí.
Ha quedado también la última gota de mi sudor al entrenar frente a mi mismísimo maestro, el que siempre lo será y jamás dejará de serlo.
Ha quedado ahí muchos recuerdos míos, muchas palabras, cosas que hasta mis mismos compañeros jedi también recuerdan.
Recorrer y ojear cada pasillo, saludar, sonreír y convivir cada día, con gente de diferentes caracteres.
~
Como una simple padawan, que entrenaba día a día, seguía por su camino y a su aire, que nada le importaba, ni pretendía arriesgar su vida por sus compañeros, así era vista yo.
Si me lo preguntaran al último segundo de mi vida, les contaría todo esto, algo que me quedó marcado para siempre, y algo que desarrolló en mi la verdadera elección que debía tomar...
Era un día clásico en la misma academia, tranquilo y aburrido, al igual que siempre. Recorría lado a lado dentro de la misma, con una mirada llena de odio y resentimiento...
¡Como odio que me den ordenes, como odio que me pidan cosas tan tontas, como odio que quieran que haga cosas a su favor, ya no aguanto mas en esta academia!
Eran mis frases mientras clave mi sable láser en una simple maceta la cual poseía una planta exacta de la fauna de aquel lugar. Terminé destrozándola, claramente, no podía seguir reprimiendo mi odio y mis broncas, por lo que decidí sacarlas afuera.
Ahora mismo, me iré de aquí junto a mi maestro, y la próxima vez que pise este mismo planeta, me vengaré de todos aquellos que me han hecho daño...-Decía en mis adentros mientras recogía mis últimas cosas, mi sable y mis desgastadas túnicas, realmente era un asco. Ojee por última vez las salas de la academia, cada esquina, como también los rostros de mis compañeros que alguna vez me han hecho pasar malos momentos.
Volveré, muy pronto volveré -. Fue mi último susurro el cual un par de padawans lograron escuchar, procediendo a reírse del mismo. Deslicé mi sable con velocidad apuntando a las cabezas de los mismos, sin señal de ataques por parte de ellos. Fue lo último que pude hacer, mientras se alejaban de mi con rapidez. Dando una última inhalación en el ambiente, recordando el fresco aroma que provenía del mismo, apagué mi sable y me encaminé en busca de mi maestro, el cual también se veía obligado a tomar otras decisiones, a cumplir su objetivo verdaderamente...
Ya es hora de irnos, pequeña aprendiz.. - Dijo mi maestro mientras colgaba su sable proveniente de la familia Gres.
Sí maestro, ya no podemos seguir aquí, ya no me siento a gusto.- Le respondí para así comenzar a caminar con impaciencia y deseo. Mi orgullo se mantenía en alto mientras caminaba delante de mi maestro observando a los asquerosos compañeros con los que solía entrenar.
¡Volverás!- Gritaron en coro simulando un tono de burla. No procedí a hacerles caso, solo a escuchar sus últimas risas, las cuales para mi próximamente serían el llanto de ahogo que oiría cuando vuelva por sus cabezas. Tenía en claro que si regresaría, no será para arrodillarme frente a nadie, sino para que los mismos se arrodillen ante mi...
El viento soplaba en dirección del norte, mientras la noche caía, y el ambiente se mantenía fresco y tenebroso a la vez, como si se tratara de un bosque maldito. Recorrimos los últimos alrededores de Endor, yo y mi maestro, decididos de comenzar nuestro viaje, a un nuevo rumbo. Observar, admirar, y despedirse del hermoso planeta donde se ubicaba una academia jedi llena de traidores y gente hipócrita, será mi último recuerdo.
Esta, es mi despedida.
Mis adentros comenzaron a sentirse vacíos, como si dejara mi alma en aquel lugar donde crecí, aprendí y viví gran parte de mi vida. Solo tendré el honor suficiente de decir que muchos merecen mi respeto por siempre, y así lo tendrán, como la Dama Addy, y otros compañeros padawan que no pude recordar sus nombres, solo el de la dama. Mis memorias eran algo que no borraré, mis errores tampoco, evitaré tapar cada cosa para que algún día me sirvan como lección y senda de vida, y seguir en mis cosas para dejarme llevar y conseguir mi misma paz, MI paz, no la suelen nombrar los demás, rompiendo dicha definición que todos suelen recitar.
Mis ojos de repente, lograron percibir una nave en la superficie del planeta de Endor, mientras yo y mi maestro caminábamos hasta la misma. Yo, por parte, despedía todo lo que viví dentro de la academia, mi mente realizaba una limpieza y un orden completo, dejando así, cada recuerdo malo enterrado en la tierra a medida que daba cada paso hasta dicha nave.
Mi maestro detuvo mi paso, a la vez captando mi atención, para luego recitar unas palabras a la vez que me miraba fijamente, como si estuviera molesto o algo...
Donde iremos no es como este sucio lugar, donde iremos será completamente diferente. Vizzal, deberás esforzarte mas, no quiero que me vuelvas a decepcionar, y te diré que donde vallamos, si decepcionas morirás pequeña, así que piénsalo dos veces antes de volver a hacer una cosa así.- Dijo mi maestro mientras mantenía una mirada totalmente fría, clavada en mis pequeños ojos azules.
Entiendo maestro, lo he entendido perfectamente.- Dije esto mismo fingiendo una mirada de temor, pero a la vez de respeto, sabiendo que las cosas cambiarían. Dentro de todo, comencé a sentirme totalmente emocionada y con ganas de saber donde íbamos, porque no llevaba ni la mas pálida idea en mente.
Así me gusta Vizzal, ahora obedece y cumple tu objetivo, que yo no estaré para ti siempre...- Al decir esto, mi maestro prosiguió a subir a la nave ya con sus compuertas abiertas. Recuerdo que no era muy grande, y era de un color oscuro como si se camuflara en la misma penumbra de la noche. Para estos momentos, todo estaba oscuro, solo se veían las estrellas dibujadas en el cielo como si se tratara de un sueño. Suspiré, por última vez, en dicho planeta, para así colocar mis pies sobre la nave, subirme a la misma, y comenzar el nuevo camino el cual tenía por seguro que, lo debo hacer desde el día de hoy, era esforzarme y dejar de ser tan débil.
Las puertas se cerraron, mi maestro me miró por última vez con una sonrisa dulce y clara como lo hacía hace tiempo, y me di cuenta que sería la última vez que la vería. Le respondí con la misma sonrisa, mientras abrochaba mi cinturón, ya cómoda en el asiento co-piloto. Al mismo tiempo, ambos llevamos la mirada al frente, a la vez que nuestras sonrisas fueron robadas por el frío que inundaba la nave de una manera fantasmal. La nave poco a poco ascendió con unos leves movimientos que hacía mi maestro, los cuales no presté atención, solo se que toqueteaba los controles y palancas de la misma. Nunca estuve en una nave, ni tampoco creo que aprenderé a usarlas, no son de mi interés, el sí sabía pilotearlas. Ascendimos, ascendimos, para finalmente despegar y dar una última, y en verdad sería una última, fría despedida en esta academia.
···
Desde el día de hoy sé que he dado la espalda a la República y a variados compañeros, los cuales lamento no pude haberme despedido antes. Me recordarán como la débil padawan, de mirada sútil e indefensa, que siempre intentó y no pudo. Pero esto no terminará aquí, lograré sorprender a cada persona que cruce en mi camino y forme parte de mi vida, todo queda grabado en mi memoria. Podré borrar todo, abandonar todo, cuando y como se me de la gana, pero algo que nunca se puede cambiar si quiera, son las pasiones...
~
Ha pasado el tiempo, demasiado rápido diría yo, frente a mis ojos, incapaz de darme la posibilidad de decir un último adiós. Será que mi destino no encajaba en el Lado Luminoso, será que no nací para ser de esta misma. Eso se puede comprobar con el paso de los días, y a la larga, me dí cuenta de donde verdaderamente pertenecía..
Recuerdo claramente mis días dentro de la Academia jedi de Endor, mis pasos quedaron grabados en cada sala de entrenamientos, cada respiro o suspiro, peleas o lamentaciones, todo ha quedado ahí.
Ha quedado también la última gota de mi sudor al entrenar frente a mi mismísimo maestro, el que siempre lo será y jamás dejará de serlo.
Ha quedado ahí muchos recuerdos míos, muchas palabras, cosas que hasta mis mismos compañeros jedi también recuerdan.
Recorrer y ojear cada pasillo, saludar, sonreír y convivir cada día, con gente de diferentes caracteres.
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Como una simple padawan, que entrenaba día a día, seguía por su camino y a su aire, que nada le importaba, ni pretendía arriesgar su vida por sus compañeros, así era vista yo.
Si me lo preguntaran al último segundo de mi vida, les contaría todo esto, algo que me quedó marcado para siempre, y algo que desarrolló en mi la verdadera elección que debía tomar...
Era un día clásico en la misma academia, tranquilo y aburrido, al igual que siempre. Recorría lado a lado dentro de la misma, con una mirada llena de odio y resentimiento...
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¡Como odio que me den ordenes, como odio que me pidan cosas tan tontas, como odio que quieran que haga cosas a su favor, ya no aguanto mas en esta academia!
Eran mis frases mientras clave mi sable láser en una simple maceta la cual poseía una planta exacta de la fauna de aquel lugar. Terminé destrozándola, claramente, no podía seguir reprimiendo mi odio y mis broncas, por lo que decidí sacarlas afuera.
Ahora mismo, me iré de aquí junto a mi maestro, y la próxima vez que pise este mismo planeta, me vengaré de todos aquellos que me han hecho daño...-Decía en mis adentros mientras recogía mis últimas cosas, mi sable y mis desgastadas túnicas, realmente era un asco. Ojee por última vez las salas de la academia, cada esquina, como también los rostros de mis compañeros que alguna vez me han hecho pasar malos momentos.
Volveré, muy pronto volveré -. Fue mi último susurro el cual un par de padawans lograron escuchar, procediendo a reírse del mismo. Deslicé mi sable con velocidad apuntando a las cabezas de los mismos, sin señal de ataques por parte de ellos. Fue lo último que pude hacer, mientras se alejaban de mi con rapidez. Dando una última inhalación en el ambiente, recordando el fresco aroma que provenía del mismo, apagué mi sable y me encaminé en busca de mi maestro, el cual también se veía obligado a tomar otras decisiones, a cumplir su objetivo verdaderamente...
- Spoiler:
Ya es hora de irnos, pequeña aprendiz.. - Dijo mi maestro mientras colgaba su sable proveniente de la familia Gres.
Sí maestro, ya no podemos seguir aquí, ya no me siento a gusto.- Le respondí para así comenzar a caminar con impaciencia y deseo. Mi orgullo se mantenía en alto mientras caminaba delante de mi maestro observando a los asquerosos compañeros con los que solía entrenar.
¡Volverás!- Gritaron en coro simulando un tono de burla. No procedí a hacerles caso, solo a escuchar sus últimas risas, las cuales para mi próximamente serían el llanto de ahogo que oiría cuando vuelva por sus cabezas. Tenía en claro que si regresaría, no será para arrodillarme frente a nadie, sino para que los mismos se arrodillen ante mi...
- Spoiler:
El viento soplaba en dirección del norte, mientras la noche caía, y el ambiente se mantenía fresco y tenebroso a la vez, como si se tratara de un bosque maldito. Recorrimos los últimos alrededores de Endor, yo y mi maestro, decididos de comenzar nuestro viaje, a un nuevo rumbo. Observar, admirar, y despedirse del hermoso planeta donde se ubicaba una academia jedi llena de traidores y gente hipócrita, será mi último recuerdo.
- Spoiler:
Esta, es mi despedida.
Mis adentros comenzaron a sentirse vacíos, como si dejara mi alma en aquel lugar donde crecí, aprendí y viví gran parte de mi vida. Solo tendré el honor suficiente de decir que muchos merecen mi respeto por siempre, y así lo tendrán, como la Dama Addy, y otros compañeros padawan que no pude recordar sus nombres, solo el de la dama. Mis memorias eran algo que no borraré, mis errores tampoco, evitaré tapar cada cosa para que algún día me sirvan como lección y senda de vida, y seguir en mis cosas para dejarme llevar y conseguir mi misma paz, MI paz, no la suelen nombrar los demás, rompiendo dicha definición que todos suelen recitar.
Mis ojos de repente, lograron percibir una nave en la superficie del planeta de Endor, mientras yo y mi maestro caminábamos hasta la misma. Yo, por parte, despedía todo lo que viví dentro de la academia, mi mente realizaba una limpieza y un orden completo, dejando así, cada recuerdo malo enterrado en la tierra a medida que daba cada paso hasta dicha nave.
Mi maestro detuvo mi paso, a la vez captando mi atención, para luego recitar unas palabras a la vez que me miraba fijamente, como si estuviera molesto o algo...
Donde iremos no es como este sucio lugar, donde iremos será completamente diferente. Vizzal, deberás esforzarte mas, no quiero que me vuelvas a decepcionar, y te diré que donde vallamos, si decepcionas morirás pequeña, así que piénsalo dos veces antes de volver a hacer una cosa así.- Dijo mi maestro mientras mantenía una mirada totalmente fría, clavada en mis pequeños ojos azules.
Entiendo maestro, lo he entendido perfectamente.- Dije esto mismo fingiendo una mirada de temor, pero a la vez de respeto, sabiendo que las cosas cambiarían. Dentro de todo, comencé a sentirme totalmente emocionada y con ganas de saber donde íbamos, porque no llevaba ni la mas pálida idea en mente.
Así me gusta Vizzal, ahora obedece y cumple tu objetivo, que yo no estaré para ti siempre...- Al decir esto, mi maestro prosiguió a subir a la nave ya con sus compuertas abiertas. Recuerdo que no era muy grande, y era de un color oscuro como si se camuflara en la misma penumbra de la noche. Para estos momentos, todo estaba oscuro, solo se veían las estrellas dibujadas en el cielo como si se tratara de un sueño. Suspiré, por última vez, en dicho planeta, para así colocar mis pies sobre la nave, subirme a la misma, y comenzar el nuevo camino el cual tenía por seguro que, lo debo hacer desde el día de hoy, era esforzarme y dejar de ser tan débil.
Las puertas se cerraron, mi maestro me miró por última vez con una sonrisa dulce y clara como lo hacía hace tiempo, y me di cuenta que sería la última vez que la vería. Le respondí con la misma sonrisa, mientras abrochaba mi cinturón, ya cómoda en el asiento co-piloto. Al mismo tiempo, ambos llevamos la mirada al frente, a la vez que nuestras sonrisas fueron robadas por el frío que inundaba la nave de una manera fantasmal. La nave poco a poco ascendió con unos leves movimientos que hacía mi maestro, los cuales no presté atención, solo se que toqueteaba los controles y palancas de la misma. Nunca estuve en una nave, ni tampoco creo que aprenderé a usarlas, no son de mi interés, el sí sabía pilotearlas. Ascendimos, ascendimos, para finalmente despegar y dar una última, y en verdad sería una última, fría despedida en esta academia.
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Desde el día de hoy sé que he dado la espalda a la República y a variados compañeros, los cuales lamento no pude haberme despedido antes. Me recordarán como la débil padawan, de mirada sútil e indefensa, que siempre intentó y no pudo. Pero esto no terminará aquí, lograré sorprender a cada persona que cruce en mi camino y forme parte de mi vida, todo queda grabado en mi memoria. Podré borrar todo, abandonar todo, cuando y como se me de la gana, pero algo que nunca se puede cambiar si quiera, son las pasiones...
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Aclaración Off ~ Mañana haré el capítulo 2, que sería el último en este relato, con el resto de los pantallazos que me faltan, gracias.
Naidath- Mensajes : 137
Fecha de inscripción : 09/06/2012
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
Capítulo II ~ La llegada.
Todos hemos cruzado momentos de nuestras vidas, en la que nosotros, u otras persona también, cambian de la noche a la mañana. Es increíble, y no se puede revertir. Unos pueden ser mejor, otros peor, pero cuando se trata del Lado Oscuro, se rompen mis palabras anteriores..
────────────────────────────────────────────────
Recuerdo perfectamente, que además de que el viaje durara mucho, yo me sentía extraña. En todo este largo y aburrido viaje, estuve pensando en la academia jedi en la cual crecí, donde se encontraban los únicos amigos que tenía y que no volvería a ver jamás.
- Da igual, seguramente me espera algo mejor..- Me dije ami misma mientras solté un suspiro seco y frío. Mi maestro rápidamente se dio cuenta que algo me sucedía, que algo no estaba bien en mi. Para esto, colocó su mano en mi hombro y me dijo sutilmente:
- Entiendo que extrañarás a muchas personas, lo sé, pero recuerda de las que te hicieron daño. En la mejor manera de enfrentar las cosas..- Seguido a esto, retiró mi mano de mi hombro y continuó piloteando la nave como lo hizo todo el viaje, callado. Mientras una lágrima acariciaba mi rostro a medida que se deslizaba por mi mejilla, un vacío se apoderó de mi corazón como diciendo ''Ya no mas''. Me quité la lágrima de mi cara, sabía que no era correcto llorar por esta estupidez. Adiós al estilo de vida como una jedi, adiós a los jedi, para siempre.
Creo que definitivamente, mi camino por el Lado Oscuro comenzaría aquí, ya no me sentía a gusto en el Lado Luminoso, que siempre ha prometido paz y jamás la dio. Además, creo que esos códigos nunca fueron ciertos y tendrían razón en cada palabra que poseían, pero me da igual, nunca les presté atención.
- Vizzal, pronto llegaremos, querida aprendiz, pero te diré algo.. desde el día de hoy, seremos compañeros de academia.- Mi maestro, al decirme esto, comenzó a hacer cosas raras piloteando la nave, para ir cada vez mas veloz. En el extremo y oscuro vacío, logré ver un planeta a lo lejos, creo que era nuestro punto de destino. En cuanto a las palabras de mi maestro, creo que tendré en claro, que el ya no será mi maestro como lo era antes, creo que será, ¿Un aprendiz mas?
~
- ¿Qué es ese planeta, dónde vamos maestro?.- Dije yo entonces viendo como cada vez nos aproximábamos a ese planeta desconocido para mi.
- Ese planeta se llama Dromund Kaas, donde se encuentra una academia sith.. - Al decir esto, sonreí con amplitud como hace tiempo no lo hacía.
Algo en mis adentros me dijo que yo pertenecía a los sith, al Lado Oscuro. Algo me lo dijo, y una extraña sensación invadió mi ser dominándolo de una manera increíble y jamás vista.
- Agárrate con fuerza Vizzal, que aterrizaremos.- Dijo mi maestro mientras cogió mi mano de lado. Sentí toda su calidez en aquel tacto, tan suave y perfecto, que jamás olvidaré. No le había contestado a mi maestro, estaba tan atrapada por una extraña ilusión, que ni yo me percataba de lo que sucedía..
Al cabo de un minuto, aterrizamos en las puertas de aquella academia sith, una academia bastante popular y poderosa. Cantidades de guardianes, guerreros y caballeros sith rodearon nuestra nave. Mi maestro y yo nos quitamos los cinturones, y mientras la compuerta se abría, nos aproximábamos a la misma con las manos en alto, lo suficiente para mostrar que no venimos a atacar. Los sith, como tontos no eran, se dieron cuenta que no éramos como ellos, sino que éramos jedi. Sus sables se encendieron rápidamente, mostrando luces rojas tan fuertes que casi lograron cegarme. Apuntaron a nuestras cabezas, con motivo de cortarlas, pero en ello, un Lord se aproximó al punto de nuestra llegada y dijo..
- Muchachos, apaguen sus sables ahora mismo. Esta gente no es enemiga nuestra.- El Lord Sith se dio cuenta de lo que éramos nosotros. Me miró a los ojos, como si quisiera penetrar en mi mente. Esa clavada de mirada era tan fuerte y amenazante que logró hacerme sentir una puntada en mi pecho. Desvié mi mirada hacia mi maestro, quien se encontraba quieto y ojeando la escena, que al fin y al cabo salió bien. Los hombres se alejaron, ya no nos rodeaban con los sables encendidos. El Lord, nos hizo una seña para que lo sigamos, y comenzó a darnos un ''tour'' por la academia mientras nos hablaba de ciertas cosas y normas, y como se maneja la disciplina aquí..
- Esta es una de las academias mas poderosas que pueden haber en la galaxia..- Decía el Lord. Caminábamos por los pasillos de la enorme academia sith, repleta de aprendices que nos ojeaban con rareza e indiferencia. Yo sin embargo, les miré de la misma manera, pero sonriendo de manera macabra. Esta vez, no dejaré que gente de mi altura me sobrepase.
- Ambos saben lo que es la disciplina, ¿no? - Dijo el Lord mientras nos detuvo a ambos en medio del corazón de la academia.- No me defrauden.
- Mi Lord, la disciplina es lo mas importante para mi.. - Dijo mi maestro mientras le reverenciaba como muestra de respeto total. El Lord, asintió, mientras yo ojeaba a mi maestro de lado de una forma extraña. El sabía muy bien de lo que estábamos hablando, que raro es todo esto..
────────────────────────────────────────────────
- Señorita, usted vaya con una de las aprendices de la academia, mientras yo charlo con este hombre para llegar a un acuerdo..
El Lord comenzó a caminar junto a mi maestro, susurrándole de cosas que me llamaba la atención escuchar. Aquel momento fue interrumpido por una aprendiz de cabellos blancos, recubierta de una túnica negra y roja. Extendió sus manos y me entregó mi túnica correspondiente, parecida a la suya.
- Hola Vizzal, no nos veíamos desde ese cruce anterior, recuerdas? - Dijo la aprendiz mientras esbozó una pequeña sonrisa.
- Ahm, Hola Lynn..- No tenía muchas ganas de hablar, por lo que nada mas ojee la túnica.
- Vamos a mostrarte el lugar restante y a cambiarte esa túnica vieja y desgastada..- Lynn comenzó a caminar delicadamente, como toda dama, recorriendo cada pasillo de la enorme academia. Yo nunca ví una academia tan grande como esta, pero tengo en claro que me encantará tal como es..
- Lynn, esto es enorme..- Le dije yo a la joven aprendiz, mientras mis ojos brillaban de tal asombro.
- Si nena, ¿Qué esperabas? - Antes de que me dejara responder, abrió unas enormes puertas que habían al final de uno de los pasillos de esta academia. Observé camas y guardarropas, todo en hileras continuas y prolijas.
- Este es el dormitorio, donde adeptos y adeptas dormimos. Puedes ir cambiándote ahora aprovechando que no hay nadie excepto yo.
Lynn cerró las puertas dándome lugar a mi privacidad suficiente. Me quité mi túnica y demás ropajes que tenía, dejándolos a un lado. Luego de ello, me coloqué mi nueva túnica sith. Me sentía rara y superior, una rara sensación volvió a apoderarse de mi.
- Si no te importa, esta túnica jedi debe ser incinerada.
- No te preocupes Lynn, haz lo que quieras con ella, ya no me pertenece.- Acaricié por última vez la túnica marrón clara de padawan que solía llevar. Ahora pertenezco a algo mejor, lo sé. No merezco vestir trapos viejos como aquellos que siempre cargué en mi cuerpo.
- Siempre supe que deberías haber sido Sith desde el principio. Cualquiera que tenga ojos puede ver que como Jedi tu no vas.
- Lynn, yo siempre sentí eso. Nunca me ha gustado ser Jedi, y aquí me siento a gusto como nunca antes me había sentido...
- Vale, aquí deberás trabajar y esforzarte mucho. Nada de vagos en esta academia, y quiero decirte además, que tendrás un gran futuro aquí.
Una pequeña sonrisa se dibujó en mi pálido y frívolo rostro. Sin embargo yo tenía por seguro que mi correcto lugar era este, en una academia sith. Mi lealtad y honor se mostrarían hacia el gran imperio, mientras que todo lo que viví en la república quedará como un antiguo y débil pasado que jamás quiero volver a repetir.
- Lynn, definitivamente, pertenezco aquí.- Dije mientras guardé mi sable en mi nueva túnica sith.
- Claro que si Vizzal, ahora vamos, te mostraré la academia.
Lynn me guiaba por los pasillos de la poderosa academia, mientras ojeaba con asombro la fauna del lugar. Además de ser mucho mas bonito que endor, era de mi completo gusto. Cabe destacar que será la última vez que se recuerde a Vizzal como padawan jedi. Yo arreglaré mis asuntos pendientes, procuraré hacerme fuerte y poderosa en esta academia, dando honor a cada miembro que espera algo de mi, que no sea defraudar..
Todos hemos cruzado momentos de nuestras vidas, en la que nosotros, u otras persona también, cambian de la noche a la mañana. Es increíble, y no se puede revertir. Unos pueden ser mejor, otros peor, pero cuando se trata del Lado Oscuro, se rompen mis palabras anteriores..
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Recuerdo perfectamente, que además de que el viaje durara mucho, yo me sentía extraña. En todo este largo y aburrido viaje, estuve pensando en la academia jedi en la cual crecí, donde se encontraban los únicos amigos que tenía y que no volvería a ver jamás.
- Da igual, seguramente me espera algo mejor..- Me dije ami misma mientras solté un suspiro seco y frío. Mi maestro rápidamente se dio cuenta que algo me sucedía, que algo no estaba bien en mi. Para esto, colocó su mano en mi hombro y me dijo sutilmente:
- Entiendo que extrañarás a muchas personas, lo sé, pero recuerda de las que te hicieron daño. En la mejor manera de enfrentar las cosas..- Seguido a esto, retiró mi mano de mi hombro y continuó piloteando la nave como lo hizo todo el viaje, callado. Mientras una lágrima acariciaba mi rostro a medida que se deslizaba por mi mejilla, un vacío se apoderó de mi corazón como diciendo ''Ya no mas''. Me quité la lágrima de mi cara, sabía que no era correcto llorar por esta estupidez. Adiós al estilo de vida como una jedi, adiós a los jedi, para siempre.
Creo que definitivamente, mi camino por el Lado Oscuro comenzaría aquí, ya no me sentía a gusto en el Lado Luminoso, que siempre ha prometido paz y jamás la dio. Además, creo que esos códigos nunca fueron ciertos y tendrían razón en cada palabra que poseían, pero me da igual, nunca les presté atención.
- Vizzal, pronto llegaremos, querida aprendiz, pero te diré algo.. desde el día de hoy, seremos compañeros de academia.- Mi maestro, al decirme esto, comenzó a hacer cosas raras piloteando la nave, para ir cada vez mas veloz. En el extremo y oscuro vacío, logré ver un planeta a lo lejos, creo que era nuestro punto de destino. En cuanto a las palabras de mi maestro, creo que tendré en claro, que el ya no será mi maestro como lo era antes, creo que será, ¿Un aprendiz mas?
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- ¿Qué es ese planeta, dónde vamos maestro?.- Dije yo entonces viendo como cada vez nos aproximábamos a ese planeta desconocido para mi.
- Ese planeta se llama Dromund Kaas, donde se encuentra una academia sith.. - Al decir esto, sonreí con amplitud como hace tiempo no lo hacía.
Algo en mis adentros me dijo que yo pertenecía a los sith, al Lado Oscuro. Algo me lo dijo, y una extraña sensación invadió mi ser dominándolo de una manera increíble y jamás vista.
- Agárrate con fuerza Vizzal, que aterrizaremos.- Dijo mi maestro mientras cogió mi mano de lado. Sentí toda su calidez en aquel tacto, tan suave y perfecto, que jamás olvidaré. No le había contestado a mi maestro, estaba tan atrapada por una extraña ilusión, que ni yo me percataba de lo que sucedía..
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Al cabo de un minuto, aterrizamos en las puertas de aquella academia sith, una academia bastante popular y poderosa. Cantidades de guardianes, guerreros y caballeros sith rodearon nuestra nave. Mi maestro y yo nos quitamos los cinturones, y mientras la compuerta se abría, nos aproximábamos a la misma con las manos en alto, lo suficiente para mostrar que no venimos a atacar. Los sith, como tontos no eran, se dieron cuenta que no éramos como ellos, sino que éramos jedi. Sus sables se encendieron rápidamente, mostrando luces rojas tan fuertes que casi lograron cegarme. Apuntaron a nuestras cabezas, con motivo de cortarlas, pero en ello, un Lord se aproximó al punto de nuestra llegada y dijo..
- Muchachos, apaguen sus sables ahora mismo. Esta gente no es enemiga nuestra.- El Lord Sith se dio cuenta de lo que éramos nosotros. Me miró a los ojos, como si quisiera penetrar en mi mente. Esa clavada de mirada era tan fuerte y amenazante que logró hacerme sentir una puntada en mi pecho. Desvié mi mirada hacia mi maestro, quien se encontraba quieto y ojeando la escena, que al fin y al cabo salió bien. Los hombres se alejaron, ya no nos rodeaban con los sables encendidos. El Lord, nos hizo una seña para que lo sigamos, y comenzó a darnos un ''tour'' por la academia mientras nos hablaba de ciertas cosas y normas, y como se maneja la disciplina aquí..
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- Esta es una de las academias mas poderosas que pueden haber en la galaxia..- Decía el Lord. Caminábamos por los pasillos de la enorme academia sith, repleta de aprendices que nos ojeaban con rareza e indiferencia. Yo sin embargo, les miré de la misma manera, pero sonriendo de manera macabra. Esta vez, no dejaré que gente de mi altura me sobrepase.
- Ambos saben lo que es la disciplina, ¿no? - Dijo el Lord mientras nos detuvo a ambos en medio del corazón de la academia.- No me defrauden.
- Mi Lord, la disciplina es lo mas importante para mi.. - Dijo mi maestro mientras le reverenciaba como muestra de respeto total. El Lord, asintió, mientras yo ojeaba a mi maestro de lado de una forma extraña. El sabía muy bien de lo que estábamos hablando, que raro es todo esto..
- Spoiler:
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- Señorita, usted vaya con una de las aprendices de la academia, mientras yo charlo con este hombre para llegar a un acuerdo..
El Lord comenzó a caminar junto a mi maestro, susurrándole de cosas que me llamaba la atención escuchar. Aquel momento fue interrumpido por una aprendiz de cabellos blancos, recubierta de una túnica negra y roja. Extendió sus manos y me entregó mi túnica correspondiente, parecida a la suya.
- Hola Vizzal, no nos veíamos desde ese cruce anterior, recuerdas? - Dijo la aprendiz mientras esbozó una pequeña sonrisa.
- Ahm, Hola Lynn..- No tenía muchas ganas de hablar, por lo que nada mas ojee la túnica.
- Vamos a mostrarte el lugar restante y a cambiarte esa túnica vieja y desgastada..- Lynn comenzó a caminar delicadamente, como toda dama, recorriendo cada pasillo de la enorme academia. Yo nunca ví una academia tan grande como esta, pero tengo en claro que me encantará tal como es..
- Lynn, esto es enorme..- Le dije yo a la joven aprendiz, mientras mis ojos brillaban de tal asombro.
- Si nena, ¿Qué esperabas? - Antes de que me dejara responder, abrió unas enormes puertas que habían al final de uno de los pasillos de esta academia. Observé camas y guardarropas, todo en hileras continuas y prolijas.
- Este es el dormitorio, donde adeptos y adeptas dormimos. Puedes ir cambiándote ahora aprovechando que no hay nadie excepto yo.
Lynn cerró las puertas dándome lugar a mi privacidad suficiente. Me quité mi túnica y demás ropajes que tenía, dejándolos a un lado. Luego de ello, me coloqué mi nueva túnica sith. Me sentía rara y superior, una rara sensación volvió a apoderarse de mi.
- Si no te importa, esta túnica jedi debe ser incinerada.
- No te preocupes Lynn, haz lo que quieras con ella, ya no me pertenece.- Acaricié por última vez la túnica marrón clara de padawan que solía llevar. Ahora pertenezco a algo mejor, lo sé. No merezco vestir trapos viejos como aquellos que siempre cargué en mi cuerpo.
- Siempre supe que deberías haber sido Sith desde el principio. Cualquiera que tenga ojos puede ver que como Jedi tu no vas.
- Lynn, yo siempre sentí eso. Nunca me ha gustado ser Jedi, y aquí me siento a gusto como nunca antes me había sentido...
- Vale, aquí deberás trabajar y esforzarte mucho. Nada de vagos en esta academia, y quiero decirte además, que tendrás un gran futuro aquí.
Una pequeña sonrisa se dibujó en mi pálido y frívolo rostro. Sin embargo yo tenía por seguro que mi correcto lugar era este, en una academia sith. Mi lealtad y honor se mostrarían hacia el gran imperio, mientras que todo lo que viví en la república quedará como un antiguo y débil pasado que jamás quiero volver a repetir.
- Lynn, definitivamente, pertenezco aquí.- Dije mientras guardé mi sable en mi nueva túnica sith.
- Claro que si Vizzal, ahora vamos, te mostraré la academia.
Lynn me guiaba por los pasillos de la poderosa academia, mientras ojeaba con asombro la fauna del lugar. Además de ser mucho mas bonito que endor, era de mi completo gusto. Cabe destacar que será la última vez que se recuerde a Vizzal como padawan jedi. Yo arreglaré mis asuntos pendientes, procuraré hacerme fuerte y poderosa en esta academia, dando honor a cada miembro que espera algo de mi, que no sea defraudar..
- Spoiler:
Roleo terminado, gracias por su paciencia y también gracias a Lillith por ayudarme con este roleo.
Naidath- Mensajes : 137
Fecha de inscripción : 09/06/2012
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
Anda, sí ha quedado muy lindo y todo, está perfecto.
Lilith- Mensajes : 85
Fecha de inscripción : 11/09/2012
Rassem- Mensajes : 1399
Fecha de inscripción : 20/08/2011
Edad : 43
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
Jerec Ankhu escribió:no me gustó
A nadie le importa tu opinión, yo me esforcé lo que pude y es algo que debí hacer porque es obligatorio el roleo de cambio de facción, así que fuera que nadie te ha llamado a comentar el ''No me gustó'', pues no lo hubieras leído y ya
Naidath- Mensajes : 137
Fecha de inscripción : 09/06/2012
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
• Vizzal Rhãdke ~ escribió:Jerec Ankhu escribió:no me gustó
A nadie le importa tu opinión, yo me esforcé lo que pude y es algo que debí hacer porque es obligatorio el roleo de cambio de facción, así que fuera que nadie te ha llamado a comentar el ''No me gustó'', pues no lo hubieras leído y ya
Aunque te moleste, tiene todo el derecho a opinar.
Buen roleo, le das un toque muy fino a la narración, te felicito.
Lettow- Mensajes : 774
Fecha de inscripción : 18/08/2011
Edad : 27
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
Rashid ad-Din Sinan escribió:• Vizzal Rhãdke ~ escribió:Jerec Ankhu escribió:no me gustó
A nadie le importa tu opinión, yo me esforcé lo que pude y es algo que debí hacer porque es obligatorio el roleo de cambio de facción, así que fuera que nadie te ha llamado a comentar el ''No me gustó'', pues no lo hubieras leído y ya
Aunque te moleste, tiene todo el derecho a opinar.
Buen roleo, le das un toque muy fino a la narración, te felicito.
Gracias, aunque no creo que quede bien ya que no pido la opinión de nadie, solo quiero que me lo legalicen y ya x'D
Naidath- Mensajes : 137
Fecha de inscripción : 09/06/2012
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
no le hagas caso, aparte esta muy bueno.. si sigues peleando te sancionaran, con que a los buenos lectores les guste, con eso basta para que quieres criticas torpes..
Khyzah- Mensajes : 462
Fecha de inscripción : 18/08/2011
Edad : 25
Localización : Yavin Iv
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
El roleo está bien, pero tu actitud no me agradó nada.
Saludos.
Saludos.
Darth Vulnus- Mensajes : 282
Fecha de inscripción : 14/05/2012
Edad : 28
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
Siqsa escribió:El roleo está bien, pero tu actitud no me agradó nada.
Saludos.
Tyranos- Mensajes : 223
Fecha de inscripción : 28/07/2012
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
Disfruta de todas las galletas que te darán..
Tragew- Mensajes : 752
Fecha de inscripción : 15/10/2011
Localización : -----------------------------
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
Seltar escribió:Disfruta de todas las galletas que te darán..
Todos extrañan que dé galletas a la gente, pero nadie me da galletas ami.
Naidath- Mensajes : 137
Fecha de inscripción : 09/06/2012
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
Siqsa escribió:El roleo está bien, pero tu actitud no me agradó nada.
Saludos.
Déjame decirte que ese último comentario que has puesto me ha causado una risa XD.
Andur- Mensajes : 447
Fecha de inscripción : 10/09/2012
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
me da ladilla leer tu roleo
Infilius- Mensajes : 580
Fecha de inscripción : 19/12/2011
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
Good, pequeña Vizzal y mi enhorabuena.
Un saludo.
Un saludo.
Nysrogh- Mensajes : 1953
Fecha de inscripción : 18/08/2011
Edad : 30
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
El roleo está muy bien, aunque a mí parecer, describes la actitud de una niña caprichosa que quieren que traten como a una reina en un templo donde va a aprender. No creas que recibirás mejor trato en el lado oscuro, aún así reitero que muy bien detallado el roleo y entretenido.
Un saludo
Un saludo
Je'daii- Mensajes : 71
Fecha de inscripción : 29/08/2011
Re: [Cambio de facción] Donde realmente debo estar...
La verdad muestro que en Dromund Kaas me siento mas a gusto de como estaba en endor. Todos mis compañeros saben mis conflictos que tenía con los demás, y eso me quitaban las ganas de estar dentro de esa academia. De todas maneras gracias, cada uno tiene su forma de ver mi roleo.
Naidath- Mensajes : 137
Fecha de inscripción : 09/06/2012
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