[Roleo de la Estrella + Obtención] Una Nueva Expedición [Relan]

Hoy teníamos programada una expediciónn hacia el planeta Mygeeto, nos la habían encomendado a mí y al Shadow Trooper Esmun. El objetivo era llegar a Mygeeto y conseguir un cristal nova, aquellos cristales eran muy inestables y tendían a explotar con el minimo movimiento después de haber sido sacados de su roca. No sabíamos exactamente lo que nos ocurriría.

- Shadow Trooper Esmun, ya estamos listos para despegar, esperamos órdenes para entrar en la nave -Exclamé haciendo un saludo imperial.
- Bien hecho, ya podéis entrar, ahora voy yo, he de informarme sobre este extraño planeta.

El Shadow Trooper estuvo buscando información durante un buen rato, lo único que pudo sacar es que Mygeeto era un planeta muy cristalino. En él vivían los Lurmen, unas criaturas muy pacíficas que siempre se negaban a la lucha, aunque estuvieran en frente a la muerte. También existían otras criaturas, enemigas de los Lurmen, estas eran los Amani y los Mastiff Phalones, unos cuadrúpedos con cabeza de raptor que cazaban en grupo.

Al cabo de treinta minutos el Shadow Trooper llegó a la nave y tras asegurarse de que estábamos todos, encendió los motores y despegó.

Cuando aterrizamos en el planeta Mygeeto todos nos asombramos al ver las enormes torres de cristal que se erguían ante nosotros, eran gigantes.

- Bien, dentro de esas torres cristalinas naturales viven los Lurmen, son pacíficos y su única y débil defensa es esconderse. Solo quiero que vigiléis su poblado, que no salga nadie de él -Dijo el Shadow Trooper Esmun mientras los soldados imperiales formábamos.
- Sí, señor -Exclamamos todos al unísono.

Cuando llegamos a aquella torre, Esmun encomendó a cinco soldados que vigilaran el poblado, y que si ven a un Lurmen le asesinaran, no buscábamos problemas por lo que eso era lo más seguro. A mí me encomendó la tarea de hacer de su guardaespaldas.

- Bien Kalix, quiero que sea rápido, en este planeta no solo existe gente pacífica, existen cosas mucho peores -Dijo Esmun tranquilo.
- Entendido señor.

Mientras decía esas palabras saqué mi E-11 ya preparada para el disparo. Estuvimos un rato caminando en dirección a las cuevas en las cuales estaban los cristales nova, cuando de repente un Mastiff se puso delante de nosotros y en menos de cinco segundos ya estábamos rodeados por seis de ellos.

- Estas son las criaturas de las cuales te hablaba, ten cuidado tú encargate de las de la espalda, yo me encargaré de las de delante -Susurró mientras encendía su sable láser.

De un movimiento rápido, el Shadow Trooper hizo un enorme salto gracias a la fuerza lanzandose encima de uno de los Mastiff cortándole la cabeza y agilmente saltó de nuevo al suelo. Yo mientras tanto disparaba a los Mastiff a la cabeza cosa que no era fácil pues sus movimientos eran rápidos. Tampoco fue muy difícil acabar con ellos, pues no podían atacar a distancia, así que me di la vuelta y observé que encima de Esmun había una de estas criaturas, no me había dado cuenta. Rápidamente efectué un disparo a la cabeza de aquel Mastiff matándole.

- Gracias soldado, no pensaba que fueras a ser de tanta utilidad.
- Gracias a usted -Dije mientras me ponía la E-11 en el hombro.
- Bueno ya solo falta lo más importante, entrar a esa cueva a lo lejos y conseguir ese maldito cristal -Explicó Esmun mientras señalaba a la entrada de la cueva.

La cueva tenía una enorme entrada de la cual no emanaba ninguna luz, pero cuando entramos nos dimos cuenta de que estábamos equivocados, hasta el propio Shadow Trooper se quedó asombrado al ver la majestuosidad de aquellos cristales. Después de un rato de silencio, encendió su sable y corto la piedra que rodeaba a los cristales y luego introduciendo su mano en el hueco sacó el cristal.

Al cabo de unos minutos volvimos a la superficie después de haber recogido a los soldados que vigilaban aquella torre de cristal. Una vez dentro de ella metimos los cristales en unas cajas protectoras y emprendimos el vuelo hacia La Estrella de la Muerte.