[ROLEO + OBTENCIÓN] Torrente de Almas

Tras ser revivido el Heraldo Sith Burtai por los miles de Espíritus Sith que predominaban en las Catacumbas de Dromund Kaas el oscuro Planeta de cada Mártir Sith y mundo de oscuridad rodeado de umbrías y de criaturas caóticas por doquier. Nadie se atrevía a habitar este olvidado mundo que hoy se encontraba asumido en las Sombras ya no era el mismo mundo de antes una de las grandes Capitales del Imperio Sith ahora era más que cenizas y ruinas y no se le prestaba ninguna importancia. Burtai fue uno de los Generales Sith más respetados durante la guerra contra la República Galáctica y llevó a cabo grandes tácticas y estrategias donde llevó a la victoria al Imperio Sith con sus numerosos hombres que eran poderosos combatientes que no tenían emoción alguna, no sentían ni piedad y mucho menos respeto a sus enemigos eran grandes asesinos dedicados a los genocidios y asesinatos en masa. El fin de la guerra en el antaño se aproximaba iba Burtai en Dromund Kass con sus milésimas de hombres todos armados con sables láser de doble hoja y rodeados de armaduras de metal mandaloriano con diferentes tipos de máscara. La República contaba con mejor tecnología mientras que en el cielo se podían ver todo tipo de cruceros disparando contra el suelo y dándoles fuego de apoyo a sus tropas como también soltaban diferentes cazas que destruían las edificaciones y asesinaban cantidades de combatientes. Burtai alzó su sable láser deseoso de empezar el combate y las cargas de Sith fueron tras él siguiéndole todos corriendo al mismo tiempo contra las filas enemigos que también eran sensibles a la fuerza eran los Ejércitos Jedis conformados por Caballeros Jedis y Guardianes Jedi adiestrados fuertemente desde su juventud en la especialidad de la guerra y de la táctica, ellos también se movían en carga hasta que los segundos pasaron y los sables chocaron. Ya la guerra había empezado entre ambos bandos, los sables de luz impactaban violentamente unos contra otros y se escuchaba el sonido de la carne cayendo al suelo de las extremidades que eran cortadas y grandes cañones de protones disparaban contra ambos bandos se sobreentendía que habían daños colaterales pero esto no le importaba a los Sith mientras que también recibían daños de los cruceros enemigos. Sólo faltaban minutos para que el conflicto terminara pero la República contaba con más tropas sin embargo los Sith a pesar de haber ganado la primera oleada solo les quedaban menos de veinte hombres la suerte ya no estaba con ellos y Burtai al ver como los Jedis desembarcaban de los cruceros acompañados de Marines Galácticos decidieron huir al Templo de la Fuerza Oscura el cual se encontraba rodeado de varias trincheras y cañones de protones con varios cadáveres de Soldados Sith alrededor y cantidades de armas tiradas en el terreno. El Temeroso Sith entró violentamente golpeando la puerta junto a sus secuaces hasta que llegaron al Altar donde estos se refugiaron esperando la llegada de los Jedi obviamente morirían; eran demasiadas Legiones Jedi contra unos veinte hombres y un General Sith cosa que por más habilidad que tuvieran morirían por la cantidad de Jedis; en algún momento tendrían que cansarse y las quemaduras los matarían igual que las infecciones parasitarias. Los desesperados Sith decidieron matarse entre ellos mismos y sucumbir al suicidio cosa que también estaba en contra de su Filosofía; pero no tenían opción alguna Burtai al no ser partidario de esto al ver que sus hombres se mataban entre ellos y al ver también que los Jedis pasaron las puertas del Templo allanando y despejando todo matando a varios Infantes Sith agonizando hasta tomando prisioneros este decidió correr en contra los Jedi mediante la fuerza y clavarle el sable al primer Jedi que vió mientras todos los Soldados dispararon contra él quitándole la vida y viendo como su oscuro cuerpo se desvanecía en el suelo de piedra del Templo.

Cuando el Emperador supo de lo acontecido decidió enviar Asesinos Sith para acabar con las familias, dinastías o la sangre de cada uno de los guerreros que lucharon en Dromund Kaas y así fue, las familias fueron asesinadas una por una o cualquier descendiente o amigo. Sus cadáveres fueron colgados al frente de la Ciudadela Sith de Korriban donde fueron expuestos y a vista de los habitantes tomados a burla en cuanto a los cuerpos de los guerreros sin vida y su honorable general fueron llevados a las Catacumbas de Dromund Kaas donde fueron sepultados sin honor alguno dado a las consecuencias de lo acontecido. Los sucesos no fueron nada agradables para el Imperio Sith ya que habían sido asediados y habían perdido casi todo en Dromund Kaas pero en un futuro podrían reponerse menos la pérdida de uno de sus mejores legiones de sensibles a la fuerza mejor entrenados. Casi cien años después de los sucesos de Dromund Kaas las almas de todos los guerreros habían despertado en el medio de las Catacumbas en los accesos había una gran basílica donde se encontraba el cadáver de Burtai asumido por los parásitos e insectos y siendo comido por estos. Los espíritus gritaban de dolor, de la rabia y de la ira que tenían en sus mismos cuerpos deseosos de obtener la venganza y de asesinar a sus ejecutores como a los que asesinaron a sus familias ¿Qué forma de revivir y de vengarse? Tomando el cuerpo de su líder y llevándolo a la vida una vez más; no para servir al Imperio Sith si no para ejecutarlos a todos y poder asumir su venganza pero su venganza sería momentánea ya que le proporcionarían vida a su Líder y solo serían siervos dentro del cuerpo ya que el espíritu de Burtai aún yacía en el cuerpo esperando a recibir energía. Tras una hora los espíritus que rondaban por el Sepulcro tomaron el cuerpo de Burtai metiéndose por su boca, por su nariz y por sus orejas pareciendo humo cualquiera hasta que se iluminó por completo el cuerpo de Burtai destrozándose las placas de metal mandaloriano y rompiéndose las cadenas que lo amarraban como también las Espadas Sith que impedían su salida. Se levantó Burtai apretando su puño y mirando alrededor con los ojos verdes habían revivido a un sanguinario que no permitía el perdón ni tampoco dejaba a alguien con vida. Era el final para muchos y el comienzo para otros...

Burtai tenía que recuperar su principal pertenencia ubicada en el Planeta Sith de Almas que se le había sido arrebatada; era un característico libro que tenía recónditos secretos sobre un oscuro arte que este mantenía en secreto pero le daba uso y le fue útil durante las guerras. Por días viajó por la galaxia buscando el planeta Almas hasta que lo encontró y llegó a su atmósfera; movilizando su Infiltrador Sith y adentrándolo sobre la fría y estática atmósfera del planeta recibiendo la nave bruscos golpes e impulsos como carecía de estabilidad cuando salió de la atmósfera la nave estaba rodeada de llamas hasta que volvió su estabilidad y el sistema de congelación exterior extinguió las llamas. El Planeta no era nada hermoso, el terreno era desiértico con poca fauna y varios árboles quemados mientras que la zona árida estaba llena de cadáveres metidos entre las arenas y varias estructuras caídas sin duda eran Zigurats que servían de culto para los Sith este Planeta Sith fue saqueado por Burtai en un pasado y ya sabía que no tenía la misma protección de antes; sin duda sabe que el Imperio Sith mantenía un campamento allí que se encargaba de investigar y dar apuntes a los Nigromantes y Hechiceros. La nave aterrizó sobre la arena a unos kilómetros del campamento donde posiblemente yacía el Libro o encontraría respuestas para saber el paradero de este artefacto mágico. Bajó de la nave colocándose un pañuelo sobre su boca para tapar su putrefacta apariencia de muerto viviente. Su actitud era tan maléfica que lo que comenzaría por hacer ahora renacido era matar a los Vigilantes Sith del Campamento y hacerse con el Libro o los datos del paradero aunque este pensó por un momento en interrogar y murmuró a si mismo ¿No sería menos brusco interrogarlos? ―murmuró― Entonces se movilizó hasta el campamento caminando lentamente por la zona árida hasta que avistó a dos hombres encapuchados visualizando unos mapas y se les mostró; colocándose al frente de ellos y mirándoles fijamente ¡¿Quién eres tu?! ―dijo algo asustado sacando su sable láser― por lo que respondió Deberías de recordarme... ¡Soy el que los llevó a la victoria! ―tras decirlo rápidamente clavó su sable en el pecho del sujeto― El encapuchado cayó al suelo muerto mientras que el otro descolgó su sable láser y lo encendió acercándose por un lado a Burtai y tratando de cortarle su extremidad derecha este respondió bloqueando el toque y dándole una patada en el estomago rápidamente saltó con la fuerza y cayó sobre él cortándole la cabeza de forma veloz finalmente la cabeza cayó a un lado y lo restante del cadáver en contra de la mesa. Burtai empujó al cadáver a un lado y empezó a ver el mapa donde avistó un Templo que quedaba a unos kilómetros; ahí era la tesorería de ellos seguramente el artefacto estaría allí y este debía arrebatárselos para llevar a cabo sus macabros y maquiavélicos objetivos de forma rápida. Burtai aplastó el mapa tras tirarlo al suelo y apagó el sable guardándolo entre sus vestimentas ya con la posición del objeto empezó su travesía caminando nuevamente por la zona árida y viendo como no había Sol y como la presencia del Bogan yacía en la zona por completo las oscuras auras de energía corrupta rodeaban a los quemados árboles por la lluvia ácida del contaminado planeta y como algunas zonas carecían de oxígeno; sin duda todo esto era inhabitable por una especie galáctica común que requiera oxígeno.

Varios kilómetros de caminata en medio de él vio a dos especias muy reconocibles; sin duda eran dos dragones del lado oscuro los famosos y temibles Hssiss que hasta los mismos Sith temían y pocos Sith podían domarlos. Una mordida de un Dragón Hssiss drena la energía vital y la fuerza dejando a su portador sin vida alguna; alimentando al dragón y volviéndolo hasta más poderoso. Burtai se sorprendió un poco por la presencia úmbrica de las dos especies sin embargo le parecían diminutas y las asesinaría por lo que descolgó su sable láser nuevamente empuñándolo y ahora encendiéndolo sin miedo a las criaturas. Las miró fijamente y veía como ambas aullaban y echaban una especie de sustancia por su boca que al parecer quemaba pero no era fuego; era más bien algún tipo de ácido. La necesidad precaria de obtener el Libro hizo que Burtai corriera en contra de uno de los dragones y le clavara el sable sobre su espalda saltando contra el cuello de la criatura y desclavando el sable decapitándola finalmente mientras saltó hacia la otra cortándole la cabeza en pleno viento y fulminándola con descargas eléctricas que provenían de sus manos. Se empezó a reír de forma macabra y siguió caminando con el sable láser sobre su mano derecha encendido y mirando a los alrededores pero lo lamentable y estúpido era que solo veía cadáveres; prácticamente era un mundo sin vida y no estaba ni poblado la única cosa que se podía ver ahí eran cuerpos esqueléticos tirados en el suelo. La neblina lo mantenía con poca visión y empezaba a ver varias ruinas y columnas sobre el suelo desplomadas en su totalidad como también empezó a ver varios ríos con torrentes fluviales y cascadas entre estos soltando agua. La niebla empezaba a seguirlo a él y a atormentarlo con la ceguera cada vez más había más y más niebla. Ya empezaba a aturdirlo y veía espíritus desplazándose entre la niebla y saliendo del río como veía manos en el río pidiendo ayuda eran manos esqueléticas completamente fantasmales cuando miró arriba del río yacía una gran colina compuesta por seis pilares y atrás de los pilares el Templo que este buscaba sin duda tenía que escalar todo eso para llegar al Templo. Vió nuevamente al río y notó que este tenía un terreno fluvial; no le parecía normal ni nada bueno pero el tenía una explicación y que era una concentración espiritual, un mundo espiritual en Almas por así decirlo. Vio a la izquierda una pequeña torre de poca altura así que decidió entrar a ella por la averiada puerta de madera que rompió con un golpe y vio varios esqueletos en las sillas y tirados en el suelo, subió las pedregosas escaleras que iban en forma de torrente hasta que llegó al final y observó el paraje y la cantidad de niebla que había en el lugar. Al final de la colina habían varias entidades moviéndose y al ver que estaban putrefactos; eran Zombies.

Spoiler:

Al ver que la niebla aumentaba más y más y que todo se volvió de color azul y verde como también empezó a ver cuerpos flotantes gritó ¡Rayos! ¡¿Qué será eso?! ¡¿Espíritus! ―exclamaba y se preguntaba muy desesperado por los gritos― Cerró los ojos unos segundos, hasta que activó la visión de la fuerza permitiéndole ver cualquier presencia con midiclorianos en su cuerpo, invisibles y también dándole luz en caso de oscuridad, tras activar la visión descolgó su sable láser y lo encendió dejando salir un haz de luz púrpura en la oscura torre y siguió caminando por las escaleras bajándolas. Los gritos no mermaban aún, se podía escuchar cada vez más hasta que Burtai empezó a bajar rápidamente y cuando llegó, no vió nada y los gritos habían cesado. Era un misterio lo de los gritos y que hayan parado como si nada por la llegada de Burtai, algo querían decirle los posibles espíritus a Burtai, quizás que era un intruso y que profanaba el Planeta de Almas. Apagó el sable láser furioso y se movió al centro de donde se encontraba ¡Ustedes, débiles entidades! ¡Muéstrense! ―gritó provocándoles― La niebla rodeó a Burtai y a casi toda la Zona más de lo normal reduciéndole más la visión al Sith. Por lo que los gritos volvieron a aparecer y al frente de Burtai se mostraron varias entidades cuyo cuerpo era luminoso y flotaban en el aire, se denotaba su oscura aura negra y su cuerpo esquelético como sus deformidades ¿Qué haces aquí forastero? ¡Esta es la sagrada abadía de Almas! ―exclamó a Burtai uno de los espíritus― Burtai respondió algo molesto ¡Yo soy libre de ir a dónde quiera! ¡Vengo en busca de lo que me pertenece! ―le gritó al espíritu― y el espíritu indignado simplemente respondió Vaya... ¡Otro de los forasteros que andan en busca de tesoros! ―tras decirle esto, empezó a reir con los demás espíritus― El espíritu respondió sin más Entiendo, Sith. Pero no te daremos el gusto, lamentablemente no tenemos el poder de ir matando como si nada, ya verás tu si te dejarás quitártelo o lo obtendrás, respeto y respetamos tu decisión ―le afirmó el espíritu― Los espíritus desaparecieron lentamente y Burtai quedó silenciado por los comentarios fantasmales de las entidades espirituales así que empezó a correr por el terreno en busca de un posible acceso que le dijera como subir la colina y llegar a la oscura abadía. Caminó algunos metros viendo los árboles con cadáveres colgando y como seguía escuchando gritos; empezó a llover repentinamente y la lluvia que impactaba con su cuerpo causaba quemaduras leves además el sonido de la cascada no dejaba escuchar nada en absoluto. Los espíritus hacían una melodía con su boca y esto empezaba a hartar a Burtai. Ya pensaba él que se estaba volviendo loco y ya estaba en un estado de frenesí; seguía caminando algo desorientado hasta que encontró un gran puente al frente de él lleno de neblina pero seguía caminando por el camino de piedra sin importar la niebla que lo abrumaba.

Spoiler:

Burtai se movía por el terreno del puente cada vez más moviendo los pies para intentar cruzarlo; pero algo lo relentizaba y trataba de impedir que este cruzara el puente cada vez más hacía esfuerzo y ponía de su parte por cruzarlo; pero la niebla lo mantenía abrumado y veía muy poco ni siquiera su visión de la fuerza lo ayudaba. Era un reto que le daban los espíritus para poder llevarse el libro era horripilante la situación en la que estaba y ya no confiaba en sus habilidades de la fuerza por que le empezaban a fallar cada vez más. Agarró impulso con sus piernas y saltó con la fuerza hasta llegar al otro lado del puente este cayendo violentamente en contra del río y la cascada llevándoselo por el torrente parecía impresionante pero era la verdad. Cruzó el puente y ya estaba a algunos kilómetros de la Abadía de Almas donde debía obtener el libro que para Burtai era honorífico y vital por los grandes secretos que este tenía y sus ejecutores querían mantenerlo fuera de este libro ya que les parecía que le daría más poder a Burtai si algún día sus hombres llegaban a revivirlo y así fue, lo revivieron y piensa obtener el libro ya sea por las malas o por buenas pase lo que pase a cualquier costo. Caminó por varios minutos hasta que llegó a la Abadía era magnífica su estructura pero la niebla lo limitaba un poco hasta que avistó la puerta y de un empujón de la fuerza este cayó al suelo aplastando todo lo que estuviera tras la puerta al ver la puerta caer se dió la vuelta y notó que uno de los Zombies casi le golpeaba con una gran maza y dió una voltereta a un lado deslizando su sable láser y encendiéndolo aunque Burtai se encontraba un poco débil por su estadía en Almas aún podía luchar y clavó el sable láser sobre la costilla del Zombie y finalmente lo decapitó viendo que otros Zombies se aproximaban salió corriendo y se adentró en la Abadía rápidamente buscando algún posible acceso donde estuviera el libro no podía ser difícil ya que la zona era pequeña. Tras indagar encontró un pequeño acceso a su izquierda donde ingresó bruscamente y se encontró una sala que al parecer era la tesorería rodeada de cantidades casi ilimitadas de oro y de riquezas pero en el altar vió el libro rodeado de un orbe de color verde que era custodiada por dos sujetos; al parecer eran híbridos y portaban vibrobastones con armaduras de color gris y máscaras aterradoras. Los aterradores guardianes del orbe se quedaron viendo a Burtai y se lanzaron contra él corriendo y ondeando sus vibrobastones mientras que Burtai formó una esfera en sus manos con toda la energía local y la lanzó contra ambos entes matando a uno nada más mientras que otro clavó el vibrobastón contra la costilla de Burtai y este agarró el vibrobastón y lo clavó del otro lado en contra del guardián. Se lo desclavó y lo fulminó a descargas eléctricas matándolo en pleno acto. Metió su mano lentamente en el orbe agarrando el libro y sacándolo con mucho esfuerzo cuando sacó el libro el orbe se desvaneció y causó una gran explosión que empujó a Burtai contra la pared dejándolo completamente moribundo y adolorido pero tras unos segundos se levantó metiéndose en libro entre sus túnicas y saliendo por el acceso hasta llegar a la salida de forma lenta cojeando.

Spoiler:

Al parecer todo seguía igual; de pronto apareció un sujeto de vestimentas negras con un sable láser rojo. Burtai no podía identificarlo pero a pesar de su posición de lucha y sus vestimentas; era algún Aprendiz Sith y estaba en lo cierto cuando notó que el desconocido se presentó ante él diciendo En nombre de Korriban, yo Ikrai exijo que me des el libro ―gritó violentamente― y Burtai respondió riéndose ¿Crees qué te lo voy a dar así de fácil? ―respondió con los humos altos― No terminó ni de decir la frase cuando Ikrai empezó a atacarlo chocando su sable con el de Burtai ambos batiéndose en una clase de duelo. Ikrai le pudo clavar el sable sobre la pierna y cortarle uno de sus esqueléticos dedos violentamente mientras que Burtai le golpeó con el mango del sable y se abalanzó contra él ambos cayendo de la colina hasta el río y ambos siendo consumidos por el torriente fluvial. Ikrai moría, su cuerpo era desvanecido. Pero antes del acto Burtai se adhirió a su cuerpo y soltó sus espíritus los cuáles empezaron a poseer el cuerpo de Ikrai mientras los espíritus del fluvial también hacían lo mismo; el esquelético cuerpo de Burtai quedó sin vida pero había poseido el cuerpo de Ikrai que era más fuerte, se veía humano y era joven por supuesto. Tenía un nuevo cuerpo y nadando por el fluvial ya dejó de desvanecerse por la cantidad de espíritus por lo que saqueó del antiguo cuerpo el libro y se lo insertó entre los compartimientos del recién poseído cuerpo. Así sacó su mano del torrente y se aguantó de una piedra posteriormente saliendo completamente mojado y con el libro sobre sus manos exclamó Ahora toca revivir a mis tenientes y ustedes estarán acabados ―tras esto empezó a reirse― y siguió caminando tranquilamente por el planeta de Almas hasta el paradero de su nave para poder largarse.


Obtengo: Libro de Nigromancia y Mortis

Si querías dejarnos ciegos con ese destello del blur lo hubieses avisado, así nos sacamos los ojos de una vez.

Por cierto, gran redacción.

Crauell Rain escribió:Si querías dejarnos ciegos con ese destello del blur lo hubieses avisado, así nos sacamos los ojos de una vez.

Por cierto, gran redacción.

Jaja, gracias.

Ya puedo comentarlo.

Lo lei anoche poco despues de que lo subieras y me gusto mucho,

Pero mola mucho el roleo.

¿Y no lo van a validar?

UP

¿Y bien cual fue el desenlace?

EDIT: Gracias, pueden cerrarlo.