[Roleo de Primus Goluud] Bestia Mítica.

En tiempos donde la oscuridad predominaba, una joven sith emprendió el viaje a Myrkr.
Así, tomo su nave y se dirigió a aquel planeta donde predominaba gran cantidad de vegetación, compuesta mayoritariamente por árboles de grandes envergaduras. Donde míticas criaturas peleaban por su sobrevivencia.

Bethel continuo caminando, estuvo horas recorriendo el lugar.
Ya la noche cayó y ella se sentía  cansada, camino algunos metros más y se sentó al pie de un árbol. Comenzó a sentir aquellas dolencias en su cabeza y cerró los ojos para descansar un poco, unos quejidos la hicieron despertarse, Se levantó rápidamente y tomó su sable láser, escuchó nuevamente esos gemidos y fue en busca de quien los producía. Se encontró con dos fieras, dos animales míticos luchando. En eso Bethel distinguió que una de estas bestias había muerto, pero ésta tenía cría.
Detrás de un árbol, La joven se escondía, busco en su mente y descubrió que
La bestia que había muerto era un Ysalamiri¹, una criatura delgada con parentesco a un lagarto
Y que su atacante era un Vornskr²,



“Bethel… Bethel…” Pensó “Piensa, ¿Qué harás?”  Bethel no lo pensó más,
Sin dudarlo dio un gran salto entre el Vornskr y la cría del Ysalamiri. Notó que dos de los pequeños se escapaban quedando uno cerca de ella, Mientras Bethel emprendía la batalla contra la Bestia,
Encendió sus sables láser, haciendo que sus luces rojizas alumbrasen un poco, inclino sus
Piernas un poco, porque sabía que la animal saltaría para morderla. Finalmente el animal corrió
En busca de su nueva presa, haciendo que la joven Dama sith callera al suelo. Se sentía débil,
No podía levantarse, intento atraer su sable pero un campo anti-fuerza hiso que sus acciones sean
nulas, Bethel estaba perdida… Hasta que sintió unas pequeñas patas en sus piernas, caminando
hacia arriba, hasta llegar a sus manos, el pequeño Ysalamiri se posó en uno de los dedos
de Bethel.

El pequeño Ysalamiri abrió sus ojos, Mientras la temible bestia se acercaba
a ellos, el Ysalamiri comenzaba a concentrarse, rápidamente lanzó una especie de esfera
que rodeaba al Vornskr, esta hacia que se debilitara , absorbia la fuerza y poco a poco el Vornskr iba
muriendo… así fue como se unieron lazos en el Ysalamiri y la Dama sith.
*Narra Bethel* Al día siguiente ya estaban alzando campamento, para volver
a casa, era la mañana, aun el viento frío se sentía en la piel, nos despejamos y salimos
de excursión, confirmamos que nos iríamos a la tarde, el Ysalamiri se escondía bajo mi manga,
era bastante pequeño pero sé que pronto crecerá.
Estuvimos todo el día hasta la tarde, no había nada amenazante y me pregunté
¿Dónde estarán los Vornskr? Nos dirigimos hacia el Norte, donde se encontraba mi nave. Al llegar,
notamos que mi nave estaba llena de Arbustos pequeños, ramas y hojas. -¿Quién hizo esto?- Me
pregunté, Sin dudarlo otra vez extendí mis manos y cerré mis ojos, Concentré mis midiclorias en mis extremidades, A través de la fuerza comencé a levitar las hojas de arboles y
en estas se unían las ramas etc. Las elevé, y minutos después, cuando ya todas estaban juntas, las coloque a un
lado, mi concentración se vio afectada, ya que sentí la presencia de alguien o algo, sin
abrir los ojos  y a través de la fuerza ubiqué que algunos Ysalamiris nos veían atentamente, el pequeño
salió de mi manga y se coloco en mi hombro. Algo extraño pasaba, ya no era solo mi mente la que
sentía, apreciaba la vista con otros ojos ¿Eso Significaba que estaba conectada, de alguna forma,
con el Ysalamiri? No lo dudé más y nos dirigimos a mi nave, di un gran salto y aterricé en  el
tren de descenso, camine despacio, intentando despegar el Ysalamiri de su ex habitad,
porque el vendría conmigo a la academia. En mi mente pensé ¿Estás bien pequeño?, y extrañamenterespondió que sí.
-Llegada a Primus Goluud-
Nuevamente en casa, La noche oscura ya estaba en Primus Goluud, El frío se sentía,
una cortina de agua me empapó, salí de mi nave y me dirigí a la academia, Mi acompañante aun
seguía en la manga de la camisa,


nos dirigimos hacia un cuarto donde objetos y animales se
guardaban para procesos de alquimia, Simplemente dejé allí al Ysalamiri y salí.
Al salir me encontré con mi maestro, Que, con su cara confusa me miraba, Me
preguntó “¿De dónde vienes Bethel?” Y yo no contesté caminé para que me siguiera, le conté
mi gran Hazaña y sólo respondió Bien.
Sólo una palabra hiso que me perdiera en mi interior, Ya todo había terminado, era hora de descansar un poco…

¡Es una historia curiosa cuanto menos! Felicidades por tu nuevo amiguito.
Con respecto al roleo, solo hay que cambiar un poco la puntuación y las mayúsculas, por ejemplo.
Me ha gustado. ^~^