[EXPEDIENTE] Xreyt Naeblis

Reputación: «Desde ahora, serás conocido como Desolous» - El guardián Jadus, a Xreyt. Apodado de dicha manera por devastar casi en su totalidad a una legión de soldados clon que defendían una luna con influencia de la República. Desolous sonó durante largo tiempo en las bocas Jedi hasta que su nombre se volvió en un mito del cual ya pocos tenían memoria. Respetado entre los Sith, por trabajo serio y riguroso, consiguiendo honores entre quienes le conocen.

Biografía: De acuerdo a la historia contada por su verdadero padre, el Lord Tairon, Xreyt nació en una luna, perteneciente a un mundo lejano, fértil con rica agricultura en las franjas lejanas del Imperio Sith. Nació en una familia de simples granjeros. Se decía que sus ojos eran tan negros como el vacío del espacio. Nunca lloró, ni siquiera de bebé, ningún animal se le acercaba, y cuando hablaba, su voz era más poderosa y grave que la de un niño cualquiera. Cuando tenía cuatro años, empezó a manifestar señales de ser fuerte en la Fuerza. Dado que sus padres no eran sensibles a la Fuerza, su padre sospechaba de la verdadera identidad del padre de Xreyt. Él confrontó a su esposa, que admitió haber cometido adulterio con un Caballero Sith encargado de visitar y comprobar de manera esporádica el estado del lugar. Desde ese momento la vida en familia no continúo siendo lo mismo. El mal tiempo vino, y su familia y el resto de la gente que vivía allí se vió obligada a ceder a negociaciones con contrabandistas y utilizar la luna como un punto de encuentro de los delincuentes para conseguir algo de dinero. La noticia no tardó en llegar a oídos Jedi, quienes sin pensarlo, mediante violencia desmedida destruyeron y arrasaron con el hogar de Xreyt, quien sería el único sobreviviente.
Su verdadero padre, desde que Xreyt nació hasta el momento del suceso, siempre cuidó desde las sombras de él, visitaba esporádicamente el hogar de su hijo. Escondido, veía a la madre de éste y a la distancia a su retoño. Dejaba una cierta cantidad de créditos galácticos y se retiraba de inmediato.
Cuando supo lo ocurrido, viajó inmediatamente dudando el rumor que había escuchado por parte de uno de sus compañeros. «Dicen que hay un único sobreviviente, y es un niño...» Una sensación extraña, le hacía presagiar que este sobreviviente, este niño, era su hijo.
Apenas la nave en la que Nathan viajaba tocó suelo, la mente de Xreyt se estremeció. Sintió una presencia conocida, cercana. Una mano cálida se posó en su hombro, el chico volteó para ver de contra luz la imagen de su padre. Se concretó el encuentro.

Ahí nació su historia como Sith. Su padre le enseñó distintos tipos de conocimientos. Lo instruyó en las diversas artes de combate. Largas horas de arduo entrenamiento o intensa meditación, ampliando conocimientos. Siempre viajaban juntos de un lugar a otro, Xreyt no entendía mucho porqué, pero poco le interesaba. La ausencia de una imagen materna que le entregara cariño, lo volvió frío lo que sirvió de sobremanera en su entrenamiento en el lado oscuro.

Largos años pasaron, Xreyt ya era un hombre hecho y derecho. Debió distanciarse de su padre por cuestiones desconocidas, a las cuales Nathan atribuyó la distribución de la Orden Sith. Xreyt vivió un tiempo como ermitaño, alejado de los Sith, de los Jedi y de la guerra en general. Un día, en la tranquilidad de su morada, recibió la visita de unos hombre, de largas túnicas negras. «Hermano» - Lo llamó uno de ellos. Una charla no muy larga terminó con Xreyt en la nave de ellos, sus hermanos, los Dark Sith. Viajó a Zonama Sekot donde una dotación no muy alta de hombres, sensibles de la fuerza se unían como hermanos para combatir contra el Imperio Sith.
En los siguientes años, su influencia y reputación se extendió, y creó miles de seguidores, algunos asustados de obedecerle, y otros siendo devotos fanáticos. Mató a miles en su ascenso al poder, con muchos de ellos torturados en ejecuciones pública para alimentar a su insaciable apetito, saboreando sus agonías. Se convirtió en un Profeta del lado oscuro, extremadamente diestro en el uso de Rayo de la Fuerza, el cual podía utilizar de distintas forma: como un único rayo o como una devastadora tormenta de la Fuerza.
El egoísmo y discrepancia se hizo notar en esta nueva organización, para que con el tiempo aquellos a los que llamaba hermanos, parecieran desconocidos. Muchos comenzaron a desaparecer, exiliándose. Xreyt, aguantó hasta el final, donde ya nada fue posible. Un ataque Sith terminó por derrocar tal ideal, devastando lo poco y nada que de Dark Sith quedaba.

Fue entonces momento perfecto, para viajar por la galaxia, sin rumbo fijo. Simplemente destruyendo y dominando lo que se le antepusiera. Así fue como nuevamente, dió con uno de sus grandes amigos en la época de su entrenamiento Sith. Éste le notifico de unos sucesos que según él, tornarían el mundo, dándole una imagen distinta a tal como lo conocemos. Una mañana, un sorpresivo mensaje llegó a su nave. Su padre le notificaba que un templo sith, acababa de surgir en lo más profundo de Rhen Var; Esperanza Oscura donde, como uno de los Lores, deseaba que fuera parte, entregándole el título de Caballero Sith.

La biografía continuará extendiéndose según desarrolle mi personaje mediante roleos, ya que es recién aquí donde comienzo a extenderla como tal.

Otros datos: Gusta ir a las zonas más bajas de Coruscant en busca de prostitutas para luego de cortejarlas, asesinarlas mediante asfixia bajo el uso de la fuerza. Detesta el color verde, porque de dicho color era el sables con que asesinaron a su madre. Entre sus túnicas siempre porta una pequeña libreta con tapas de cuero en la que apunta los nombres de todos sus enemigos.