[Roleo + Obtención] Más que un sable. [Revisado]

por Rakdos Jue Dic 29, 2011 9:49 pm

Capítulo I

Aquel día se respiraba buen ambiente en el Templo, los younglings estudiando, los demás Padawans con sus Maestros, los Caballeros que no tenían Maestros dando clases con los Guardianes, Centinelas y Consulares y los Maestros, tomando las decisiones del Templo. El tiempo no era el de todos los días, hacía soleado. Ese día, era el cumpleaños del Caballero Rakdos Swan. Aquel día, el Caballero Rakdos tenía muchas ideas, como llevarse a sus Padawans a la Galaxia y comer fuera, o reunir a todo el Templo, para irse a una taberna a celebrarlo.

El Caballero Rakdos Swan, de camino a la habitación de su padre, el Maestro Vandir Swan Kenobi, observaba un artilugio que su primer Maestro, Strahler, le regaló. Era su sable, el que más apreciaba, ya que fue una muestra de recompensa hacia el Caballero Rakdos tras haber entrenado tanto en sus últimos días. Llegó ya a la puerta de la habitación, y llamo dando dos golpes.

-Maestro, tengo que hablar con usted. - decía Rakdos mientras se sentaba en un banco que había entre dos estatuas y debajo de una lámpara, la cual iluminaba la mayor parte del pasillo.
-Ahora salgo Caballero, perdóname un momento - respondía el Maestro Vandir.

Rakdos, mientras esperaba a que saliese el Maestro, observaba algo que le había impactado mientras observaba su mango de sable mientras recorría los pasillos. En el mango, había una escritura. En ella se podían distinguir dos palabras: Rhen Var. El Caballero Rakdos, de inmediato sabía que ese planeta guardaba algo que quería entregarle el Maestro Strahler y con mucha velocidad, se levantó y empezo a andar a su cuarto a prepararse. Ya en su cuarto, preparó el mapa, su cinturón con un sable y su mochila con dos sables, varios botes para muestras junto con agua y comida. Después de ello, se puso unas túnicas que solía ponerse para viajar, de color gris la camisa, metida por el pantalón negro, con un cinturón algo ancho, y unas botas blancas, que le subían hasta las rodillas con el pantalón por dentro. Por encima, se puso una túnica gris oscura cerrada, y se puso la capucha. Como no sabía lo que le aguardaba en su nueva aventura, decidió dejar un escrito.

´´Saludos, no sé quien leerá esta carta, pero la dejo escrita, porque salgo a una misión. Si no vuelvo por la noche, no esperéis que este a salvo, sino todo lo contrario, algo me habrá sucedido y me encuentro en un apuro. Iré a Rhen Var, y sellaré el camino con el sable laser, dejando marca por donde pase. Seguir el camino, y si leéis esto y es por la noche, decirle a William Swan que utilice el localizador, lo llevo puesto. Que la fuerza os guie. P.D: Es mi cumpleaños, y me gustaría haberlo pasado con vosotros, pero hoy no va a ser posible.``

Tras escribirla, el Caballero Rakdos, estaba preparado, asi que se dirigió a el hangar del planeta, se subió a su nave, marcó las coordenadas, y se puso rumbo a Rhen Var.

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Continuará ...

por Nysrogh Jue Dic 29, 2011 10:10 pm

No estuvo mal, aunque me hubiera gustado que fuese mas largo o tuviera mas narración, a parte en la carta no se nombra a nadie como el autor de dicha carta, supongo que sabrán quien eres por el nombre de 'William Swan'.

Un saludo, sigue así Rakdos no está nada mal.

por Rakdos Jue Dic 29, 2011 10:25 pm

Capitulo II

´´¿Qué será lo que guarda el sable allí ...?`` era la pregunta que se planetaba miles de veces el Caballero Rakdos mientras viajaba hacia Rhen Var. No era muy común, que un sable, tubiese grabado el nombre de un planeta en su mango.
Ya entrando en la órbita del planeta, el Caballero procedió a aterrizar en la superficie del planeta. Bajó de su nave, y se encapuchó dejando visible nada más la boca. Ya en el suelo, empezó a caminar, buscando alguna señal. Hubo un momento, en el que el Caballero pudo localizar la posible entrada a un pasadizo secreto, pero tan solo era un pequeño tunel sin salida.

Cansado de dar vueltas y vueltas, el Caballero Rakdos, se sentó por un momento a observar el sable laser. Mediante la ampliación de su vista con ayuda de la Fuerza, pudo localizar, una especie de mapa, grabado en las letras del planeta, como si le indicase la dirección. El Caballero, sin pensárselo dos veces, volvió a la superficie, observando un letrero pequeño, al lado de un árbol, que ponía: Rhen Var. ´´Aquí es, pensó el Caballero Rakdos`` mientras seguía el orden que le indicaban las microflechitas grabadas en la pequeña inscripción en el mango de su sable. Empezó a seguir el camino, arrastrando su sable dejando marca en el suelo.

Llegó a una pared grisacea, la cual le provocaba un picor en la nariz. El picor fue constante, provocándole varios estornudos. Tras el último estornudo, el Caballero empezó a observar en la pared, un mosaico. Decidió pasar la mano sobre la pared, y ver que era. Empezó a pasar la mano una y otra vez, retirando mucho polvo de la pared. Ya quitando la mayoría del polvo, se sacudió las manos con fuerza para limpiarse. Observaba que era una pared muy grande, la cual intentó empujar. Como con la fuerza natural no pudo, decidió con la ayuda de la Fuerza, un empujón. No había resultado, no se movía la puerta. Se sentó varios minutos a pensar lo que podía ser. Mientras observaba el sable, se daba cuenta del tacto del sable, era muy parecido al de la puerta. Prendió su sable, lo clavo en la puerta, y empezó a abrir un hueco por el que entrar. El sable era la llave de esa puerta. Ya abierto el hueco, entró. La única luz que había era su sable. Guiado por la poca luz, observaba que eso eran ruinas de un antiguo Templo Sith, había esculturas de Maestros Siths que el conocía, era un estilo más oscuro la composición de sus paredes... etc. Subiendo las escaleras, escuchó un ruido, el cual le hizo eco en su cuerpo. No era el ruido de un movimiento, sino de una voz pidiendo auxilio a lo lejos. Su voz era familiar, y el Caballero Rakdos, fue a ver quien era ese ser que le sonaba.

Ya 15 minutos después, entró en una sala oscura, en la cual había un trono. Por el trono, le pareció que era la sala de los Lords Siths.

-Rakdos, ¿eres tú?- una voz que parecía dañada sonaba a un lado de Rakdos.
-Si, soy yo. ¿Dónde estás? ¿Quién eres? Traigo agua y comida para ti - decía Rakdos moviéndose continuamente.
-Soy yo, Strahler, tu antiguo Maestro - respondía Strahler con una voz dañada.

Rakdos, tras escuchar ese nombre, se alegró, ya que fue su único Maestro.

-¡Strahler! ¿Dónde estás? - añadía Rakdos con una voz de alegría.
-Detrás tuya- contestaba con una voz tenebrosa Strahler mientras ondeaba su sable.

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Continuará...

por Thumnus Vie Dic 30, 2011 5:55 pm

Muy bueno

por Rakdos Vie Dic 30, 2011 6:55 pm

Capitulo III

El Caballero Rakdos, tras ver tal acto con el sablo, empezó a pensar que le iba a atacar. El antiguo Maestro de Rakdos, con su pálido rostro, se empezó a acercar a Rakdos. Rakdos, posicionándose en Soresu, le hizo reir al sith.

-¿Todavía sigues con eso?- decía Strahler mientras se llevaba la mano en la que no sujetaba el sable a la frente.
-Si. Quieto donde estás - añadía el Caballero Rakdos.
-Tranquilo, Rakdos, no te quiero hacer daño - respondía el sith mientras bajaba su sable.

Rakdos, al ver la posición indefensa de su antiguo Maestro, decidió hacerle caso.

-Veo que has observado bien el sable, me lo imaginé ... - dijo el sith mientras le indicaba el camino por donde había venido Rakdos.
-Claro, Strahler. ¿Qué haces aquí?- preguntaba Rakdos.
-Te lo contaré de camino - respondía Strahler mientras adelantaba a Rakdos.

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Ya casi en la salida, el antiguo Maestro del Caballero Rakdos, le comentaba que ese Templo, donde el fue a hacer una visita a su antiguo Maestro, fue atacado por los cloones y que el se quedó encerrado, ya que en la parte inferior del Templo Sith, quedaban aún muchos más cadáveres y por suerte el no murió. Ya veían el hueco de la puerta, el cual había hecho Rakdos con su sable láser. Strahler, con un parón, le indicaba a Rakdos que fuera saliendo, que el salía ya. Rakdos hizo caso, y salió del Templo Sith. Ya fuera, se sentó en una especie de roca la cual procedía de las ruinas del Templo Sith.

Habían pasado 5 minutos, y el Caballero Rakdos se empezó a preocupar por su antiguo Maestro y decidió entrar. Al levantarse, de camino al hueco, se escuchó un grito a lo lejos.

-¡Caballero Rakdos! - gritaba un Padawan del Templo Jedi

Rakdos, tras el gritido, se dió la media vuelta, y observó al wookiee. Por su aspecto y su raza, conocía a ese Padawan, era Tyvokka. Detrás de Tyvokka, se podía observar a su aprendiz Goinash, al Guardián Zaikard, al Maestro Soul, al Centinela Klaus, al Padawan Eeth, el Padawan Kraibor y a su hijo y Padawan, William Swan. Éstos últimos se acercaron con rapidez donde Rakdos estaba situado.

-Rakdos, ¿qué haces aquí? - preguntaba Tyvokka y a su vez hacía eco la voz de Goinash.
-Tan solo fui a donde el mango de mi sable me decía- respondía Rakdos.
-¿Sable? ¿Cómo puede ser?- preguntaba ahora el Guardián Zaikard.
-Así es, mi Sable tiene grabado Rhen Var, y en las letras de Rhen Var, un pequeño mapa, entonces decidí seguirlo - respondía el Caballero Rakdos mientras abrazaba a todos.
-Ent- pronunciaba el Maestro Soul mientras todos los compañeros de Rakdos encendían sus sables láser.

Rakdos, tras ver tal acto, miró a sus espaldas y observó a Strahler.

-Bajar los sables, es Strahler, mi antiguo Maestro -comentaba Rakdos mientras se acercaba a Strahler, ahora con una cosa oculta entre sus brazos.

Todos, mirándose entre ellos, hicieron caso al Caballero Rakdos. Strahler, se acercó a Rakdos, mientras miraba a todos, pero sobre todo al Maestro Soul. El Maestro Soul, centrado, se aclaró la voz para que Strahler le dejase de observar. Todos, en silencio, se pusieron a andar hacia la superficie del planeta. Ya en la superficie del planeta, el Caballero Rakdos, le daba un codazo suave a Strahler, el cual iba a su lado.

-Mira, ese cartel fue la clave de todo- le susurraba Rakdos a Strahler mientras señalaba al cartel de ´´Rhen Var``.

Strahler, apartándose un momento del grupo, se dirigió al cartel. Ya delante del cartel, Strahler lo movió con la Fuerza, y oculto en el cartel, había un mapa del planeta. Éste, lo cogió Strahler y se lo entregó a Rakdos mientras le daba las gracias por su rescate.

Rakdos, cedió su nave al Guardián Zaikard, para el ir en la nave del Templo con Strahler y hablar con el sobre muchas cosas.

Ya después de un pequeño viaje, llegaron a Pesfavri, descendieron, y bajaron de sus naves. De camino al Templo Jedi, Rakdos observaba en silencio a Strahler. Éste miraba a su alrededor con interés.

Después de 5 minutos de paseo, dentro del Templo Jedi, el Sith se sentía extraño. Rakdos, le llevó unas túnicas ya que las suyas estaba rasgadas. Éste se las puso, y se sentó en un sillón del Templo.

-Rakdos, felicidades -decía Strahler mientras ponía sobre la mesa el paquete que había sacado del Templo.

Rakdos, con mucha curiosidad y alegría, se acercó a Strahler, le dió un abrazo, y se sentó con el en el sillón.

-Strahler, ¿cómo te has acordado? - preguntaba Rakdos.
-Te acuerdas, en el Centro médico, tras tu ataque de los Siths, miré tu ficha médica, y me acordé de esta fecha, ya que fue el día que yo ... me fui - respondía Strahler.

Rakdos, se quedó sin palabras en ese momento, y le dió otro abrazo. Strahler, le devolvió el abrazo, y le dijo que abriera el Regalo. Rakdos, se dirigió al paquete, en el cual, no por su tamaño, sino por quien lo regalo, sabía que era un regalo especial. Ya abierto, era una caja de madera, madera de roble, con un mosaico dibujado en el dentro de la tapa, y en las 4 paredes que formaban la grande caja. Rakdos, la abrió y observó lo que había. En ella, había un sable Helix, unas túnicas Jedis, y una medalla de color dorado algo desgastado.

-Rakdos, el sable y la medalla, quería dártelas cuando fueras Caballero, pero no pude. Las túnicas, son mis túnicas de cuando yo era Jedi - decía Strahler poniéndose de pie.

Rakdos, alzándose también, sonriendo se dirijía con Strahler al banquete de su cumpleaños, el cual le prepararon todos los compañeros del Templo.

Continuará...

por Thumnus Vie Dic 30, 2011 7:43 pm

Aun mejor la continacion cheers

por Rakdos Vie Dic 30, 2011 8:28 pm

Capitulo IV

Tras el banquete, el cual le agradó a Rakdos por su cantidad de comida, sus buenos adorno y su ambiente, el Caballero Rakdos, se retiró con Strahler cuando los demás se fueron a tomar el aire o a dormir, ellos seguían conversando y discutiendo para que Strahler, se quedase a dormir solo esa noche, que debería de estar cansado. Strahler, muy modesto se negava, ya que no pintaba nada entre Jedis. Rakdos, al contrario, le explicaba que solo era una noche, y que por la mañana, marchaba a su Templo. Tras 5 minutos largos para los dos de discusión, Strahler accedió a quedarse, pero antes se dió un baño y se puso de nuevo las túnicas Jedis. Strahler, durmió en la cama donde dormía antes el hijo de Rakdos, la cual, estaba al lado de la ventana del cuarto de Rakdos.

Ya por la mañana, el Caballero Rakdos, se levantó, y observó que la cama donde había dormido Strahler, estaba hecha. No había rastro de Strahler por el cuarto, ni el extenso pasillo. Rakdos decidió salir a buscar si estaba su nave. La nave estaba, no habían tocado las naves, seguían todas y en el mismo estado. Ya de vuelta al Templo, en la cascada del planeta, Rakdos observó una figura conocida. Era Strahler, que estaba sentado en la piedra del rio. Rakdos se acercó, y le preguntó que que hacía el. Strahler, se levantó y le contesto que se debía ir ya de allí, que era lo mejor para los Jedis, corrían peligro. Rakdos le preguntó que a dónde iba a ir después de Pesfavri, y Strahler, le contestó que a su antiguo Templo Sith. Rakdos, lo acompañó a dentro a por todo lo que había dejado allí Strahler.

Después de un cuarto de hora, en el Templo, sonaba el descenso de varias naves enemigas.

-¡Todos los Jedis preparen sus sables! ¡Atacan el Templo! - gritaba el Maestro Vandir.

Todos alborotados, corriendo por los pasillos, chocándose entre ellos, fueron a por sus sables, y se dividieron en grupos. Eran 39 miembros en total, y se divieron en tres grupos de 13, y en cada uno había 1 Maestro y un Guardián. El primer grupo, se colocó en la entrada del Templo, dividiendo ese grupo en 2 colocándose en lo extramos. Luego, el segundo grupo, se colocó en el patio central, en el centro del Templo y el tercero, en el final del templo haciendo casi un grupo entero con el segundo.

Ya habían descendido los Siths, y iban camino al Templo. Se podía distinguir a los Darth Exur Kan y Gevura Vermogen, acompañados de un grupo alrededor de 7 siths más, en los que se podían distunguir a los Guardianes Grawn y Zogel Tainted, el Cultista Gres, el Maestro Sith Lettow y 3 siths más, que llevaban una máscara. Ya en la puerta, el Darth Exur Kan, con una cara seria y encendiendo su sable junto con los demás Sith, se podía ver como con ansia de muerte, entraban al Templo.

No era muy extraño que estubiesen allí, ya que mientras el banquete, el Padawan Kraibor, comentó que les siguieron el rastro una nave Sith. Eso a Rakdos le dió algo de preocupación, pero no sabía esa noche que irían a buscar a Strahler por la mañana.

En las puertas del Templo, puedieron resistir a los Siths, y los Jedis, necesitaron que un grupo de Jedis del segundo grupo, fuese a combatir. Mientras combatían, sobresalía un duelo entre el Darth Exur Kan y el Guardián Kerth Caelum. Estos dos, con movimientos de cuerpos y giros de sable impresionantes, llevaban alrededor de 10 minutos en un comabate que no se veía clara la victoria. Hubo un momento en el que el Guardián Caelum, caido en el suelo y desarmado, estaba a punto de morir. En aquel momento, Exur estaba dando un giro, que al caer le clavaría el sable a el Guardián, pero no fue así, la intervención del Centinela Roxum, le impidió acabar con la vida del Guardián. Éste último atrajo su sable, lo prendió y Exur, luchando contra el Centinela y el Guardián, prendió su otro sable, y manejando sus dos sables a la vez, peleaba contra los dos Jedis.

-¿Dónde está Strahler?- preguntaba Exur echando un pulso de sables contra los dos Jedis.
-No sabemos donde está, y aunque lo supiésemos, no te lo diríamos - contestó el Guardián Kerth.

Tal comentario, hizo entrar en cólera a Exur. Tras ganar el pulso de sables este último, envió un empujón de la Fuerza al Centinela Roxum, que acabó chocando contra una estatua y cayendo al suelo desmayado. Kerth, con su manejo de sable, logró desarmar a Exur su sable izquierdo, pero no pudo resistir, Exur esa vez lo ganó. Kerth se quedó sin sables atraídos por el Maestro Sith Miphras. Exur, sin piedad alguna empezó a estrangular a Kerth. Kerth, en el aire flotando con un movimiento continúo de cuerpo y un sonido de arcada, fue salvado por segunda vez, pero no por el Centinela ni mucho menos, sino por el Maestro Whie. Exur, tras haber sido su fuerza absorbida, intentó atacar al Maestro Whie, quien le empujó con la Fuerza a las afueras del Templo.

Los Jedis, tras la caída del Darth Exur Kan, se volvieron más fuertes. El grupo dos completo, junto con 7 miembros del grupo 3, salieron junto con los 3 Jedis que quedaban en pie en la entrada a defender. Los Jedis lograron expulsarles del Templo, pero volvían a descender más naves enemigas. Esta vez eran naves Imperiales y de guerreros y aprendices Siths. Los Imperiales, dirigidos por el Gran Moff Leyten Caelum, rodearon el Templo Jedi, dejando a los Jedis sin ninguna escapatoria. Los aprendices y guerreros Siths, obligaron a los Jedis a retroceder y volver de nuevo a el interior del Templo, donde ya actuaron todos los Jedis. No había más Jedis, y no se sabía dónde estaba el Caballero Rakdos ni Strahler.

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Tras una larga hora de batalla, seguían vivos casi todos los Jedis. Resultó en ese momento, ser la esperanza de los Jedi, el descenso de naves aliadas. Eran los miembros de los Templos de Achillea, Alderaan y Kashyyyk. Ya en superficie, se podía observar como, centenares de sables láser de todos los colores posibles, eran prendidos y se acercaban.

A las afueras del Templo, se formó la batalla entre los Jedis de Kashyyyk y Achillea, y los Siths que estaba todavía en pie, luchaban contra los Jedis de Pesfavri y Alderaan.

Continuará ...

por Welfarest Vie Dic 30, 2011 8:56 pm

Buenisimo el roleo Rakdos te felicito

por Rakdos Vie Dic 30, 2011 9:09 pm

Se agradece Thumnus y Vherkness, me motivan para seguir continuando haciendo roleos.

Un saludo.

por Rakdos Vie Dic 30, 2011 10:00 pm

Capitulo V

En los alrededores del Templo, el verde natural que tenía la hierba de la esplanada, se convertían en rojo oscuro. Se veía, como un Jedi, se metía entre los Imperiales y reflejaba los disparos causándoles la muerte. Se fue reduciendo el número de Imperiales, quedándose alrededor como 3 escuadrones completos, de los muchos más que vinieron.

Mientras tanto, en la entrada del Templo, sucedía lo mismo, los guerreros y aprendices que vinieron como refuerzos, salieron rápido a sus naves, ya que los de Achillea, superaban en número a los siths. Darth Gevura, rodeado por un grupo de 5 Jedis, que le cerraban el paso, en un movimiento de posar su mano en el suelo de manera brusca, creando un aura, lanzó a los Jedis hasta la pared. El Cultista Gres, salió junto con los aprendices y guerreros Siths, ya que su especialidad no era el combate. El Guardián Grawn y el Guardián Zogel Tainted, espalda contra espalda, luchaban contra numerosos Jedis, a los cuales les costaba vencer. El Maestro Lettow, luchando contra el Caballero Xaqlt, cara a cara, tenía complicada su salvación, ya que el Caballero Xalqt, había mejorado para entonces. Tras ver que no tenía posibilidades, el Maestro Sith, salió corriendo, pero en su intento, el Caballero Joe Kaithel, le lanzó su sable, dejándole sin piernas y cayendo en seco al suelo desangrándose. Xalqt y Joe, fueron a por los Guardianes, los cuales cada vez estaban más débiles. En aquel momento, Darth Gevura estaba luchando contra el Guardián Le Singh y el Cónsul Rideck Singh, los hermanos Singh. Éstos últimos, tras abatir a Darth Gevura cortándole los brazos, ya que su manejo de la Fuerza y de sable era única. Después de ser cortados los brazos, le colocaron las esposas en las piernas para que no pudira esconderse, quedando así preso. Los guardianes, siendo derrotados, sin sables, sin fuerzas y rodeados, fueron los últimos en quedar en pie, los demás Siths escaparon, sieron atrapados o muertos. Sin embargo, el único Sith sobreviviente, fue Exur, que tras el brusco ataque del Maestro Whie, no se le volvió a ver.

Casi todos los Jedis, menos los que lucharon desde el principio, salieron a acabar con los Imperiales que quedaban en pie y a por el Gran Moff, que éste acabo siendo decapitado tras un lanzamiento de sable.

Ya acabada la guerra, los Jedis eran hombres de pocas palabras. Después de una 1 hora y media, apareció Rakdos, lleno de sangre y con un sable prendido en su mano.

-¡Rakdos¡- gritaba su padre, el Maestro Vandir Swan.
-Padre, todo esto ha sido por mi ignorancia. Debí no haber ido a Rhen Var y no haber empezado todo esto, lo siento, de veras - decía Rakdos mientras se limpiaba la sangre de su cara.
-Rakdos, ¿y Strahler? - preguntaba Vandir.

Rakdos señalaba a el salón de Caballero, contándole que Strahler, quería que Rakdos le enseñase el Templo, cuando en el Salón de Caballaros, intentó matarlo, que estubo luchando contra él, y que Strahler no tenía mucha práctica de sable, que llevaba luchando contra él desde antes de la batalla y que acabó con él.

-Bueno Rakdos, ahora no es momento de pensar en eso, sino de reformar el Templo - contestaba Vandir sonriendo.

Después de 4 horas, sobre las 10 y media de la noche, tanto los Jedis de Pesfavri como los que vinieron a ayudarlos, fueron reunidos en el patio central, donde una carpa fue elevada y había picoteo, juegos para los younglings y un gran espíritu.

Días después, a los Templos Jedi, llega la noticia, de que Darth Exur Kan, fue arrestado por la República cuando intentó ir a que los Siths arrestados, fueran libres.

[Roleo + Obtención] Más que un sable. [Revisado] 50495113163888719768370.th

FIN.

Rakdos recibe 1 sable Helix y 1 túnica Jedi
Ficha de Rakdos: http://www.habbowars.com/t209-ficha-de-rakdos-rakdos?highlight=Rakdos

por Thumnus Vie Dic 30, 2011 10:12 pm

Cada vez mejor, gran final, espero más roleos tuyos Shocked

por Sione Vie Dic 30, 2011 10:37 pm

Muy buen roleo, la batalla estuvo genial Sigue así.

por Lettow Sáb Dic 31, 2011 12:40 am

Buen roleo, merece las obtenciones para su calidad pero te recomiendo disminuir el tamaño de las imágenes a uno solo, VÁLIDO.

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