[Roleo de cambio de facción] 61 DGLS.

Lancé mi fardo dentro de la nave de transporte, sin prestarle mucha atención a como terminaba. Caminé con las manos en los bolsillos hasta alcanzar a Zayne.
-Mis hombres custodiarán los cazas del Gault dentro de la nave de desembarco hasta que lleguemos.
-Bien. Lo siento Erika. No pude darte un hospedaje estable.-Me contestó, mirándome tras su máscara.
-Bah. No importa en absoluto. Últimamente no me siento dueña de mi vida, ¿sabes?
-Por qué.-Inquirió, girándose hacia mi.
-No se. Todo ha cambiado tanto. No se si la extraña soy yo o todo lo que me rodea.
-Mh. Dime, ¿soy todo lo que queda de tu vida pasada?
Agaché la cabeza. Era la pura verdad.
-Si. Si que lo eres.-Caminé hacia la nave, procurando evadirme de todo.-Creo que tengo algo de depresión.
-Se te pasará cuando vayamos de fiesta. No te ofusques Erika. No se como lo haces, pero con tu solo aliento puedes darle vida a todos los que te rodean o crear la más oscura tenebrosidad entre sus corazones.
-Gracias Z. Vamos.-Le tendí la mano y le ayudé a subir conmigo a la nave de transporte.

Una vez en la inmensidad del espacio, procuré distraerme leyendo una novela gráfica. Se titulaba "Las Dagas de Aqaqir", y trataba sobre un conjunto de 4 dagas rituales que se usaron para el sacrificio de 50 niños en honor a unas deidades identificadas como personificaciones de la Fuerza. De pronto, note un cambio en la trayectoria de la nave.
-Erika, siéntate en el asiento del copiloto. Vamos a saltar al hiperespacio.-Dijo Zayne girándose hacia mi, y luego volviéndose de nuevo al frente. Me levanté y caminé a la cabina, donde me senté y me puse los enormes cinturones  de material plástico extensible. Al mirar en el panel de mandos, me di cuenta de que no nos dirigíamos al núcleo.
-¿Drongar? ¿Por qué?
-He recordado que tengo aun algunas amistades pendientes que nos pueden dar... trabajo.
-Drongar... ¿No era un planeta Dark Sith?
-Yup, vamos a ver como nos acogen.
-Uhm. Bueno, confió en ti. Eres mi salvoconducto.-Mire hacia delante, moviendo los labios.





¿Y qué se supone que buscamos?-Pregunté mientras trataba de no tropezar con las abundantes raíces de los árboles titanicos que cubrían la superficie.
-Buscamos a alguien, no a algo. Camina, llegaremos al viejo templo, a ver si tenemos suerte allí.
Fueron unos cuantos minutos de camino entre la vegetación, los sonidos de los animales (en absoluto tranquilizadores) y las nubes de mosquitos. Pero una figura se materializó frente a nosotros cuando llegamos a un camino empedrado... Y Zayne pareció reconocer a la alta sombra que se plantó frente a nosotros.
- Ho.. hoo-la.. hola.-Empezó un nervioso Zayne.
-Buenas, ¿quién eres?-Preguntó el sujeto, que despedía un aura de misticismo. Zayne se levantó su mascara frente al hombre.
- Hombre Zayne, cuanto tiempo, un placer verle por aquí nuevamente. ¿Qué deseas? ¿Algo en especial?
- Sí, bueno..
- Puedes hablar, te escucho.
- Bien, me encontraba en Artus Prime, y los Jedis, dejaron nuestro templo en ruinas..
El sujeto le cortó la palabra entonces.-Ah bien, ya sabes que aquí tienes un sitio, adéntrate conmigo, te daré cobijo.
-Vale, de acuerdo. Vamos Eri.-Dijo, caminando entonces con el hombre. Yo afirmé con la cabeza, y me adentré por el camino hacia el templo de los Dark Sith.

Es una mierda.
La única motivación es el cambio de facc. no "le he puesto el corazón"
Cualquiera que recuerde mis escritos anteriores sabe que esto es una mera formalidad comparado a mis relatos serios.

Sí, pero aún está bien SAPO.

estás hecho un killer

El cambio procede a ser válido.