[Roleo de Obtención] Memorias de la Guerra

Calor y humedad, una gran descripción del planeta Devaron, cálido planeta cuyos habitantes poseen grandes cuernos en su cabeza. Antiguamente, fue el lugar donde ocurrió una masacre de la mano de Savage Opress, en las Guerras Clon. Y allí es donde se encontraba Nino Valdrium, o también conocido como Dinnoco, el acólito Sith. Había llegado hace algún tiempo, tras permanecer en Dathomir durante su soledad. De momento, estaba dentro de un bar popular de la ciudad. Allí, observó a un droide b1 sirviendo como camarero. El dueño del bar, que se encontraba como cocinero, lo identificó ni bien entró y se mantuvo alerta.

Droide B1: - ¿Qué quiere que le sirva, señor?

Nino: - Por ahora, sólo quiero hablar con el dueño.

Droide B1: - Entendido.

El droide parecía estar dañado en el chasis, y claramente había sufrido modificaciones en su programación. Sin más, se acercó hasta al dueño y le susurró unas palabras. Para ello, bajó el volumen de su vocabulador. Instantáneamente, se acercó un devaroniano. Al parecer, era el encargado del lugar.

Dueño: - Saludos ¿Qué es lo que necesitas de mi humilde bar?

Nino: - Me han comentado que eres el mejor cuando se habla de droides de batalla antiguos. Me refiero a los antiguos droides de la CIS.

Dueño: - Ah, los separatistas. Pues si, posee 4 droides más además del camarero. ¿Por qué?

Nino: - Me gustaría saber el precio de una unidad.

Justo cuando el encargado se disponía a abrir su boca para comentarle el costo, unos disparos de bláster alertaron a toda la cuadra. Unos bandidos atentaban contra el bar. Sin dudarlo, el Sith deslizó su sable láser, y lo encendió. Una hermosa hoja carmesí se hizo presente. Salió del bar para comenzar a defender. Tal parecía que atacaban desde motos de reacción, o swoops. Mediante la fuerza, hizo levitar al vehículo, dejándolo inmovilizado. Acto seguido, lanzó su sable de tal manera que decapitara al conductor. El acompañante bajó, apuntando a Dinnoco. Fue entonces cuando atrajo su sable y desvió el primer disparo. Con una velocidad sorprendente, realizó un tajo Sith que provocó la muerte del renegado. Todo esto movilizó a los bandidos a una rápida retirada, dejando a dos de sus hombres muertos. Al darse vuelta, Nino Valdrium vió al dueño, quien se le acercaba.

Dueño: - Sriamos, son una banda que aterroriza a la zona. Ya no se qué hacer. Envié a 30 hombres a su campamento, sólo regresaron 2.

Nino: - Yo puedo acabar con ellos. Sería un peso menos para los devaronianos.

Dueño: - Si lo haces, te daré uno de esos droides de los que me preguntaste, sin costo alguno. Su campamento se encuentra a la vuelta de la esquina.

Tras ese intercambio de palabras, el Sith se retiró hacia el punto marcado. En la entrada a lo que parecía ser un almacén, dos devaronianos se encontraban hablando, con blásters en sus manos. Utilizando la fuerza, Dinnoco hizo levitar un tacho de basura, lanzándolo hacia ambos sujetos, los cuales quedaron inconscientes. Se introdujo dentro de la guarida, la cual estaba llena de devaronianos que no se habían alertado de su presencia. Se mantuvo en sigilo hasta llegar con el líder, el cuál se encontraba junto a unos cuantos guardias.

Líder devaroniano: - Entonces, nuestro siguiente ataque será un incendio en ese bar. Yo me encargar... *Se alertaba de la presencia de Dinnoco* ¿Qué haces aquí?

Nino: - Me dijeron que eres un tipo malo que le hace cosas a quienes no la merecen. Y es por eso que me llevo tus cuernos.

De ahí, todos los guardias apuntaron sus carabinas al Sith, pero fue cuestión de segundos para que Nino los empujara a todos con la fuerza, causándoles graves traumatismos, debido a que se habían golpeado con paredes y demás. El líder resistió al ataque, descolgando de su espalda una espada cortosis de doble hoja.

Líder devaroniano: - Hasta aquí llegas, muchacho.

Una batalla comenzó, el chocar de los sables daba al lugar un ambiente nunca antes visto. Estaban muy nivelados. Nino realizó un corte horizontal, acto siguiente saltó sobre el devaroniano para intentar decapitarlo, pero rápidamente evadió el ataque. El líder de los bandidos empleaba técnicas muy parecidas a las del guerrero Darth Maul. Finalmente, Dinnoco le dio una estocada en el pecho, dejándolo medio muerto.

Líder devaroniano: - Entonces hasta aquí ha sido mi recorrido... Observa la pared a mi izquierda. Mira todos esos cascos de los republicanos. ¿Te suena "La masacre de Devaron"? Tuvieron una gran victoria, Sith. Pero fui yo el que le dio a la República los datos de su existencia en Mandalore. Obviamente, Sidious, como canciller supremo, asesinó a Savage y, supuestamente, a Maul. Yo hice todo.

Una furia arremetió a Nino. Decapitó al líder, quitándole los cuernos. Los guardó en sus túnicas, y también tomó la espada cortosis. No se fue de manera sigilosa, sino que quería ser visto por todos. Al verlo, los devaronianos apuntaron sus blásteres hacia él. Pero Dinnoco, cuya rabia no desaparecía, electrocutó a todos con una serie de rayos de la fuerza. Alzó sus manos, estando a punto de crear una tormenta dentro del campamento. Sus ojos se tornaban rojo-sangre. Su ira se había vuelto su más fuerte aliada. Dejó incinerados a todos, retirándose del almacén. Finalmente, volvió al bar.

Dueño: - ¿Qué ha ocurrido? Está saliendo humo del almacén.

Nino: - Mi trabajo, señor. Tome *De sus túnicas, sacaba los cuernos del líder devaroniano* una prueba de mi éxito.

Tras esto, el encargado hizo un chiflido al aire. Tras unos segundos, un droide b1 se acercó hasta él.

Dueño: - Droide B1. Desde ahora, él es tu amo.

Droide B1: - Entendido

Nino: - Espero que el bar encuentre mejores momentos en el futuro.

Dueño: - Hoy nos has servido mucho. Espero que nos volvamos a cruzar.

Al final, el droide b1 acompañó a Nino hasta su apartamento, cerca del bar. Allí dentro, el droide HK-50 observó a ambos. Los dos androides se quedaron junto al acólito, el cuál guardó en una especie de baúl, la espada cortosis que había conseguido. Por mucho tiempo, el bar se mantendría de pie, pues otra plaga del mal había sido extinguida.
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Aclaraciones:

Y las acepto Gracias, lo tendré en cuenta para lo próxima.

En revisión.

Ambas obtenciones son válidas y más que nada, gracias a la crítica de Daniel me he fijado mejor. Sigue así Dinnoco, vas mejorando cada vez.